"Quería dejar un mensaje que fuera lo más gracioso posible". Así explica Borja Tabares, vecino de Sant Joan de Moró, el escrito que dejó en su coche ante las peticiones de que se retirara de la vía pública por estar abandonado, que se ha hecho viral. El joven explica cómo se originó toda esta polémica, que en principio tendrá pronta resolución.

Todo empezó cuando se le pinchó una rueda hace entre mes y medio y dos meses, que es el tiempo que el vehículo, un Opel Astra, lleva estacionado en el mismo sitio. "Iba a llevarlo a mi taller pero el dueño estaba de baja, por lo que opté por esperar. Ya hemos quedado para que me la arregle el próximo lunes", indica Tabares.

El joven, de 32 años y natural de Cantabria, se enteró de que alguien había ido al Ayuntamiento dos o tres veces a denunciar que el coche estaba abandonado, y decidió actuar de esta manera debido a que tiene "serias sospechas" de la identidad de este vecino, quien además sabe que el vehículo es de su propiedad y está aún activo.

"El texto está puesto con todo el cariño. Hice dos o tres versiones y me quedé con la más suave. La primera era mucho más ofensiva", explica Tabares, que trabaja en una fábrica de la zona. Como es propietario de más coches y de una moto eléctrica no ha tenido problemas para desplazarse.

"La verdad es que quería que el mensaje fuera viral", confiesa. A fe que lo ha conseguido.