Llegaron desde Argentina en julio del año pasado con el objetivo de que sus dos hijos tuvieran una educación mejor. Atrás dejaron su zona de confort y seguridad para embarcarse en una nueva aventura en Castelló. Esta es la historia de Jonathan y Pilar, propietarios de Hola Manola Café & Cosas Ricas (ubicada en la avenida de la Mare de Déu del Lledó, 18, de la capital de la Plana).
"Nos hicimos cargo de un local que estaba muy viejo y hemos querido darle un nuevo lavado de cara. Así, tras restaurarlo, proponemos un concepto más fresco de pastelería artesanal", comenta el matrimonio, que destaca por su enorme valentía al apostar por la apertura de un establecimiento hostelero en plena pandemia de covid-19, con las numerosas restricciones y medidas higienicosanitarias que hay que hacer frente por la seguridad de todos. Desde el primer momento “queremos destacar por una atención personalizada muy amigable, ya que intentamos siempre tener muy buena onda con el cliente”, revela Jonathan. Otro de los valores añadidos sería la calidad de sus productos, ya que "nos proveemos de los mejores ingredientes".
Las empanadas de ternera típicas de Argentina, totalmente artesanales, y las empanadas de pollo son el principal reclamo Hola Manola Café & Cosas Ricas aunque la pastelería artesanal también está muy demandada, con productos estrella como el alfajor con dulce de leche, las minicake, los diferentes macarons y distintas tartas. A ello se suma un servicio de bocadillos que se hacen al momento.
Además, entre otros servicios que ofrecen es el de realizar encargos para cumpleaños o fiestas. "Realizamos tartas personalizadas y mesas de dulces. Además, el apartado salado también tiene mucha salida en eventos y las empanadas están muy solicitadas", destaca Jonathan.
Redes sociales y objetivos
Dada la importancia hoy en día de internet y las redes sociales, la cafetería cuenta con un perfil oficial en Instagram (@holamanolacafe), en el que muestran fotografías de sus productos a todos sus seguidores. "Estamos muy contentos en Castelló, muy agradecidos con nuestros vecinos del barrio que nos recibieron muy bien y nos sentimos bienvenidos. Nosotros vamos a devolver todo este cariño en forma de trabajo, para que sepan que siempre que necesiten nuestros servicios nos van a tener", comentan.
“El objetivo que nos marcamos a corto plazo es hacernos conocer y nos catalogue como un lugar moderno con muy buena atención y productos de calidad”, señala el propietario, quien añade que "a larga distancia nos gustaría tener nuestra clientela fidelizada y que sea un lugar de referencia para los que buscan una pastelería artesanal con buen ambiente". Actualmente, debido a las restricciones del covid-19, el horario comercial que tienen es de 8.30 horas a las 18.00 horas, de lunes a sábado.
