El cotonet entró en el pleno de la Diputación de Castellón. De forma literal. El representante de Ciudadanos Domingo Vicent sacó de una bolsa cítricos afectados por esta plaga, que mostró a los representantes del resto de formaciones políticas representadas en la corporación provincial. Una vez más, la preocupación del sector agrario fue objeto de debate, que culminó con una moción aprobada, aunque sin lograr consenso.

No fue posible acordar una declaración institucional conjunta, por lo que el equipo de gobierno, de PSPV y Compromís, lograron el respaldo de su texto, mientras que el presentado por PP y Ciudadanos se encontró con la mayoría de votos en contra. Ambos documentos eran muy similares, con peticiones para que haya ayudas a los afectados y más recursos a la investigación, pero hubo un aspecto insalvable: el metil clorpirifos, un fitosanitario que la Unión Europea no permite desde el pasado año. La oposición reclama que la Diputación se una a la petición de las organizaciones agrarias con el fin de que el Ministerio de Agricultura solicite un uso temporal, mientras que socialistas y Compromís expusieron su rechazo a esta propuesta.

Dudas

Desde las filas socialistas, Santi Pérez mencionó que este producto «ha sido un freno a la expansión» de la plaga, pero que no había sido capaz de extinguirlo desde que apareció en el 2009. Además, señaló que en el último año «hubo dos alertas sanitarias» por detectarse restos de la sustancia, «algo que pone en riesgo a las exportaciones de los cítricos». Pérez incidió en las medidas para tratar de frenar a este insecto, como la inversión de 2,2 millones para colocar trampas de feromonas, dinero que se ampliará en el 2022. 

El portavoz del PP, Vicent Sales, recordó que hace un año «se aprobó una moción semejante», y pasado este tiempo, «las organizaciones agrarias, la Unió y AVA dicen que las medidas adoptadas han sido un fracaso». Justificó la autorización para un uso temporal del metil clorpirifos. «Pedimos lo mismo que estas organizaciones», comentó, al tiempo que defendió compensar a todas aquellas fincas que tengan más del 10% de afectación por el cotonet.

Por parte de Compromís, Pau Ferrando reclamó «ayudas para paliar el problema, pero no podemos dar apoyo a una moción que defienda el uso de una sustancia tóxica», como se solicitaba en la moción de la oposición.

Domingo Vicent, por Ciudadanos, defendió que una aplicación del fitosanitario en primavera «haría posible que en octubre no quedaran restos del producto», justo en el momento en el que empieza la campaña de recolección.

La vía biológica, a medio plazo

Por el momento, las actuaciones de la Conselleria y el Ministerio pasan por los tratamientos biológicos, con la suelta de depredadores naturales. Los intervinientes coincidieron en señalar la esperanza de que los resultados se vean a medio plazo, aunque desde las filas de la oposición se teme por los estragos en la inmediata campaña y los huertos que puedan quedar abandonados. 

Incorporación y acuerdos

La corporación oficializó un cambio en el grupo del PP, con la entrada como diputado del concejal de Altura Vicente Rodríguez, que sustituye a Antoni Cases. Un cambio previsto hace dos años.

Por otro lado, hubo unanimidad a la hora de aprobar una declaración institucional para abrir una mesa de diálogo en el Hospital Provincial que facilite una aprobación consensuada de los nuevos estatutos. También existió el acuerdo de todos para dar el visto bueno a una moción que reclama la mejora del servicio de Correos, especialmente en el interior.