ECONOMÍA

El azulejo teme otra cascada de ERTE si no hay más ayudas

Buena parte de los expedientes caduca el 31 y hay empresas que preparan otros para 2023

Un operario trabaja en una firma azulejera, un sector que este año ha recurrido masivamente a los ERTE.

Un operario trabaja en una firma azulejera, un sector que este año ha recurrido masivamente a los ERTE. / MEDITERRÁNEO

E. AGUILAR

Las próximas semanas van a ser cruciales para el futuro laboral de decenas de trabajadores del azulejo. El Boletín Oficial del Estado (BOE) publicará, presumiblemente este miércoles el detalle del paquete de ayudas anunciado por el presidente del Gobierno y será entonces cuándo las empresas del sector podrán conocer con exactitud el calado de la medida, así como la subvención a la que pueden aspirar. Y aunque quedan muchísimas incógnitas por despejar, en el sector temen otra cascada de expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) para 2023 si no llegan más apoyos de los anunciados ayer por el presidente del Gobierno para mitigar la escalada del gas. 

Los últimos datos de la Dirección General de Empleo de la Generalitat muestran claramente cómo las empresas del clúster han acabado masivamente recurriendo a una fórmula que permite suspender temporalmente contratos o reducir las jornadas laborales. Hasta el 18 de diciembre, los ERTE en el clúster ya incluían a 11.000 trabajadores, entre fábricas de cerámica y el segmento de esmaltes. Y eso significa que la inmensa mayoría de las empresas del sector de Castellón han recurrido a este mecanismo para intentar contrarrestar los elevados costes del gas.

Que 89 azulejeras y otras tantas compañías de esmaltes hayan recurrido a los ERTE en los últimos doce meses no significa que los casi 11.000 trabajadores incluidos hayan estado todo el año sin trabajar. Hay profesionales que han visto reducir su jornada (por ejemplo, de ocho a seis horas diarias), otros trabajan a semanas alternas, otras compañías presentaron el expediente en junio y lo activaron en septiembre... la casuística es variada. Y es que del total expedientes presentados a lo largo de este año, en estos momentos hay activos ERTE que afectan a algo más de 1.300 empleados.

La mayoría caduca el 31

Una parte importante de todos esos expedientes caducan en apenas tres días, con lo que ya son numerosas las compañías del sector que están negociando nuevos ERTE para 2023. El Grupo Victoria, propietario de Keraben y Cerámicas Saloni es una de ellas, aunque según fuentes sindicales al menos otra veintena de compañías se encuentran en la misma situación, con lo que todo apunta a un primer trimestre del año con más expedientes de regulación en el sector.

Los sindicatos, no obstante, se muestran prudentes e insisten en que, en estos momentos, la incertidumbre es absoluta. «Vamos a ver que pasa en las próximas semanas. El sector está pasando por un momento muy complicado y el recorte en el empleo está siendo importante», aseguran. 

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