Denuncian la muerte de su madre "por negligencia" del Hospital de Vinaròs

El 5 de febrero del 2022 falleció Maria del Carmen García en el Hospital General de Castelló después de un largo periplo en busca de un diagnóstico «acertado» y un tratamiento para atajar sus dolencias, manifestadas en dolor abdominal, en el Hospital Comarcal de Vinaròs.

Sus tres hijas interpusieron este lunes una reclamación de responsabilidad patrimonial contra la Conselleria de Sanitat ante un «manifiesto error de diagnóstico» y al considerar que «se hubiera podido evitar el fallecimiento» pues «los profesionales actuaron de forma negligente».

El proceso

La familia ha puesto en marcha de esta forma el procedimiento administrativo, según el documento elaborado por Ardura Abogados al que ha tenido acceso Mediterráneo, dejando ahora un plazo de seis meses para que se pronuncie el departamento que encabeza Miguel Mínguez.

La petición relata como la víctima, que murió con 69 años poco después de jubilarse tras trabajar como limpiadora en el mencionado hospital del Baix Maestrat, visitó la consulta de un facultativo del sistema público en numerosas ocasiones, detallando más de una decena desde que en el 2017 presenta dolor abdominal hasta que se produce el trágico desenlace.

En el escrito se recoge que en una de ellas, en el 2019, se deriva a la paciente a Castelló, donde se le diagnostica una nefritis y una necrosis tubular aguda, aunque los episodios de dolor abdominal continúan. «En el 2020 vuelve a visitar Urgencias de Vinaròs con la misma dolencia, recetando simplemente Almax».

No es hasta finales del 2021 cuando se le diagnostica una pancreatitis edematosa, según el escrito. El 23 de enero del 2022 regresa al hospital vinarocense por el mismo motivo, recibiendo el alta al considerar el médico que sufre un «cólico biliar complicado». Seis días después se repite el diagnóstico, hasta que el 2 de febrero queda ingresada por «pancreatitis aguda litiasica». La paciente fue derivada dos días después al General, «ya muy grave», donde determinan que padecía una «pancreatitis aguda biliar con necrosis infectada», produciéndose su fallecimiento al día siguiente pese «al gran esfuerzo de estos sanitarios por salvarle la vida», como reconocen las familiares.

Visitas continuas

«No advirtieron ni realizaron las pruebas médicas necesarias para poder determinar la enfermedad causante de la muerte a pesar de sus antecedentes y continuas visitas», valoran, añadiendo que «de haberse procedido correctamente se podría haber evitado, sin duda, su fallecimiento». Por ello, solicitan una indemnización al Consell, en base a los baremos existentes, de 67.137 euros, a repartir entre las tres herederas de la fallecida. «No lo hacemos por el dinero, sino para que se haga justicia», señala Mari Carmen Bernal, una de las hijas.

Desde Sanitat descartaron este martes pronunciarse sobre la cuestión ante el corto lapso de tiempo transcurrido desde la presentación de la reclamación, argumentando que todavía no está en manos del Hospital de Vinaròs. Únicamente apuntaron que la misma seguirá el cauce oportuno.