Reduce en un 40% el impacto ambiental

Becsa y UPV crean un pavimento más sostenible para los carriles bici

Utilizan material cerámico y asfáltico recuperado para la construcción

La innovación ya se prueba en Burriana y se extenderá a otros municipios de Castellón

Imagen del carril bici desarrollado en Burriana con el nuevo pavimento.

Imagen del carril bici desarrollado en Burriana con el nuevo pavimento. / MEDITERRÁNEO

R.D.M.

La empresa castellonense Becsa, del grupo Simetría, y el Grupo de Investigación en Ingeniería de Carreteras de la Universitat Politècnica de València (UPV) han diseñado un nuevo pavimento más sostenible para los carriles bici. 

La innovación, bautizada comercialmente como BeGreenAsphalt, incorpora materiales reciclados procedentes de residuos de construcción y demolición, en concreto material cerámico y pavimento asfáltico recuperado, como sustitutos de los áridos y ligantes convencionales utilizados en la fabricación de mezclas bituminosas para la construcción de carriles bici.

Elimina los áridos naturales

David Llopis, investigador del proyecto, explica que con el nuevo pavimento "eliminamos por completo los áridos naturales, que hemos sustituido a partes iguales con un 50% de áridos de residuos cerámicos y un 50% de pavimento asfáltico recuperado", lo cual resulta en "una mezcla bituminosa compuesta 100% por material reciclado" y "reduce el impacto de llevar a vertedero dichos residuos y no es necesario extraer de cantera árido natural".

El nuevo pavimento se ha utilizado ya para la construcción de un tramo experimental de carril bici en la localidad de Burriana y está previsto su uso en nuevas actuaciones durante este año en otras localidades de la provincia de Castellón.

Efecto de las materias primas

Por su parte, Aida Marzá, técnico de Normalización, Control de Calidad e I+D+i de Becsa, detalla que «la reducción del impacto ambiental, en kilogramos de dióxido de carbono equivalente por tonelada de BeGreenAsphat, es de alrededor del 40%», fundamentalmente por la disminución de los efectos sobre el medio ambiente de las materias primas.

El nuevo pavimento es resultado del proyecto ReCyclingLane, financiado por la Agència Valenciana de la Innovació de la Generalitat valenciana y que tenía como principal objetivo diseñar pavimentos bituminosos más sostenibles para los carriles bici.