La tierra siempre tira. Las costumbres entre las que se cría una persona representan un patrimonio que invita a su preservación. Ayer se cumplieron 25 años de la ilusión de un grupo de aragoneses, bien residentes en Castellón o en poblaciones limítrofes con Teruel, por conservar sus raíces, para lo que fundaron el grupo folclórico Ecos de Aragón, que celebró ayer la efeméride con una misa baturra y un homenaje al patrón aragonés, San Jorge.

Los actos comenzaron durante la mañana con una explicación sobre la figura del santo, así como de su vinculación con la citada autonomía y con Cataluña. Tras esto, se dio paso a la ceremonia religiosa, que se ofició en la parroquia de Sant Vicent Ferrer en Castellón.

"Esta celebración consiste en una adaptación de los cantos litúrgicos a ritmo de jota, interpretada a varias voces, a dúo y solista", según reconoció el coordinador del grupo Santos Serrano, en declaraciones a Mediterráneo. El siguiente acto consistió en una comida de hermandad, "que reunió a 120 personas", en un restaurante de la capital, a lo que le siguió un acto jotero, que contó con la presencia de la rondalla, los cantadores y el cuerpo de baile.