Piden ayuda para poder seguir ayudando. La asociación Colombia nos Une, con sede en la Gran Vía Monteblanco de Castellón, tiene cada vez más complicado continuar con su labor benéfica tal y como sus miembros desearían, ya que "no damos abasto y necesitamos más recursos". Las más de 3.000 familias que están inscritas en su base de datos como solicitantes de ayudas en forma de asignación de comida, que recogen cada 15 días, hacen que la entidad esté "desbordada", ya que el incremento de personas necesitadas debido a la crisis económica no se corresponde con un aumento en la cantidad de provisiones trimestral destinada por parte del Banco de Alimentos, que en la actualidad es de casi 6.000 kilos.

Las reservas de la asociación están, en la actualidad, prácticamente vacías, y la próxima remesa de comida no llegará hasta mediados del próximo mes. Por ello, su presidente, Germán Fernández, reclama a las instituciones mucho más apoyo. "Hemos solicitado al Banco de Alimentos que nos amplíen nuestra dotación para que sea de unos 10.000 kilos, pero han rechazado la petición porque dicen que no nos pueden dar más", asegura. Fernández, sin embargo, no se rinde y pide a esta institución que "eleve la petición al Ministerio de Agricultura, porque tenemos a mucha gente hambrienta".

El representante de Colombia nos Une refuerza su petición con un argumento principal, la naturaleza abierta de la institución que preside. "A pesar de llamarnos Colombia nos Une, atendemos a todas las personas que lo soliciten y en nuestra base de datos tenemos tantas familias españolas como extranjeras, e incluso desde otras asociaciones como la Fundación Punjab, de ayuda a la etnia gitana, nos derivan a mucha gente", declara.

Largas colas

Aunque quizás el argumento principal son las colas de gente que se acumulan casi a diario en la puerta de la sede reclamando alimentos "y a las que en la actualidad no podemos satisfacer como nosotros querríamos".

Y es que desde Colombia nos Une ya han tenido que rebajar la cantidad de las viandas que destinaban normalmente en cada entrega --arroz, leche, galletas o maíz, entre otros productos-- para poder estirar la ayuda durante más tiempo.

La labor de la institución ha sido reconocida incluso desde el Gobierno --"hemos recibido felicitaciones ministeriales por nuestra labor", dice Fernández--, pero desde la misma piden que se les valore como se merecen y, sobre todo, que les dejen seguir ayudando a los necesitados de Castellón.