Un estudio elaborado por La Unió de Llauradors revela que los campos de cultivo abandonados en la Comunitat crecen de forma alarmante y en el caso de los cítricos se han duplicado en el transcurso del último año como consecuencia de la pérdida de ingresos, según los datos del propio Ministerio de Medio Rural. La Unió alerta de que en un año se ha pasado de un 4% de campos abandonados a un 8% y que el abandono ha pasado de tierras del interior al litoral. Esto provoca un problema medioambiental, pero también dificultades económicas.