En bloque. Todos a una. Las cinco universidades públicas valencianas pedirán la derogación del decreto por el que el Ministerio de Educación que dirige José Ignacio Wert cambia la estructura de los estudios superiores, del modelo de 4 años de grado y 1 de máster actual, al 3+2, con 3 años de grado y 2 de máster.

Pese a aceptar la moratoria de dos cursos para la implantación de la nueva arquitectura universitaria, el presidente de la Conferencia de Rectores de las Universidades Públicas Valencianas (CRUV) y rector de la Universidad Miguel Hernández de Elche, Jesús Pastor, avanzó ayer que los cinco campus “están en contra de la reforma”, como dejaron patente en la reunión de los máximos representantes nacionales, y tildó de “sinsentido” la nueva norma, “sin analizar la actual”. Y todos se mantienen a la espera de un vuelco electoral en las elecciones generales. “No sabemos qué saldrá, pero sí que la oposición está en contra de esta reforma y prevé derogarla”, apostó el ilicitano. De momento, la UJI y la Universitat de València elevaron la pasada semana el tono de las críticas a la reforma y solicitaron institucionalmente que se tumbe el decreto.

Pastor incidió en que “las cinco universidades públicas vamos a una”, en un bloque compacto que ya ha tenido sus resultados tras la reivindicación del pago de la deuda histórica de la Generalitat; y que solicitó ya a la consellera de Educación, Mª José Catalá --que dio el OK--, que “a tiro hecho, tras aprobarse la reforma unilateralmente, sin consensuarla con las universidades, en Madrid, todos los campus, públicos y privados, arrancarían la reforma al mismo tiempo en la Comunitat”. “Está en peligro la financiación; y los estudiantes temen el encarecimiento de sus estudios”, explica el presidente de los rectores.

El crear una “universidad española a dos velocidades, que no se puede permitir”, según Pastor, es uno de los dolores de cabeza de los rectores valencianos, que temen que la vecina Cataluña dé marcha atrás en la moratoria e implante el próximo curso el 3+2, entrando en una “competencia directa” con los mismos títulos en Castellón y la Comunitat. H