El diputado provincial de Medio Ambiente, Mario García, informó este martes de que la Entidad de Saneamiento de Aguas (Epsar) ha propuesto la utilización de las plantas de purines que permanecen cerradas, cuatro de las cinco existentes --Vall d’Alba, Salzadella, Albocàsser y Sant Mateu-- para el tratamiento de lodos, con lo que se abre la puerta a la reutilización de las instalaciones.

García explicó que la Diputación, que valora positivamente la idea, está ahora a la espera de que la Epsar le remita un borrador con los detalles del proyecto. Se trata de un plan del que informó, a su vez, a los portavoces en la institución provincial de Compromís, Xavier Trenco; y Castelló en Moviment (CSeM), Iñaki Vallejo; así como la portavoz adjunta de Ciudadanos (Cs), Cristina Fernández, con quienes visitó el establecimiento de Vall d’Alba, cuya propiedad ya ha recuperado la Diputación de manera formal, una vez concluidos los trámites administrativos.

Mario García indicó que esta visita se produce después de que CSeM pidiera una comisión de investigación sobre las cinco plantas de purines --solo la de Todolella funciona--, y el propio diputado de Medio Ambiente ofreciera dar toda la información que los grupos de la oposición requirieran en el ámbito de las comisiones ordinarias. De hecho, según García «hace quince días, ya facilitamos el expediente completo, y han podido comprobar que no hay ninguna irregularidad».

La gestión de las plantas, que se construyeron con la financiación de fondos europeos Feder, se adjudicó a una empresa que «después no pudo continuar con ella, porque el mercado no cumplió las expectativas», indicó el diputado de Medio Ambiente.

En estos momentos, el proceso de recuperación de la titularidad de las instalaciones está en su última fase y, dijo García, se espera que en las próximas semanas se haya completado al 100%.

denuncia de Csem // Por su parte, el diputado de Castelló en Moviment, Iñaki Vallejo, señaló tras la visita a Vall d’Alba que «ha habido robos de material por el abandono absoluto y la planta está en muy mal estado». Añadió que «hasta ahora ya se han perdido once millones de dinero público», y puso de manifiesto que, a su juicio, «no se puede gestionar el dinero de todos con tanta irresponsabilidad», y alertó de que «habrá que hacer de nuevo una inversión enorme».