El pacto de PSOE y Podemos que hará posible contar con un nuevo Gobierno --sin la etiqueta de provisional aunque con fuerza limitada-- incluye toda una batería de medidas que afectan a Castellón y sus habitantes al igual que al resto de los españoles.

Algunas de las promesas inciden, en todo caso, de manera directa sobre colectivos perfectamente cuantificables. Es el caso de los cerca de 90.000 trabajadores que esperan la subida del salario mínimo; alrededor de 40.000 autónomos que esperan las mejoras anunciadas y los más de 242.000 empledos inscritos en la Seguridad Social que aguardan la derogación de la reforma laboral y los cambios que lleve implícitos. Más de 132.000 pensionistas viven también con la expectativa de un aumento de sus pagas, que han iniciado el año sin actualizar.