Sin heridos, pero con carreteras cortadas, camiones atrapados, rescates a conductores, algún accidente leve y pueblos con cortes de luz y teléfono o semiaislados fueron algunas de las consecuencias del paso del intenso temporal de nieve que azotó Castellón. La borrasca Filomena que puso en jaque a todo el país, obligó al pluridispositivo de Emergencias en la provincia a trabajar sin descanso para evitar males mayores y evitar sobre todo los municipios aislados. En desbloquear estos accesos trabajaron desde primera hora y con éxito los bomberos, aunque llegada la noche y con la poca visibilidad que dejaba la nieve a la hora de adivinar el contorno de las carreteras, desdibujadas, algunas vías secundarias quedaron cerrada.

A las 21.00 horas, en Castellón, se acumulaba casi el 77% de incidencias de la Comunitat en carreteras del interior con uso obligado de cadenas (44) o cerradas (20). Pueblos como la pedanía de Bel, con único acceso desde Rossell --y donde hoy se seguirá trabajando por abrir paso--, quedaron aislados, con los efectivos atentos por si hiciera falta movilizar la unidad de rescate de montaña. Pero en general, la mayoría de localidades tenían alguno de sus accesos viarios habilitados. Así, en El Toro se habilitó una salida; así como en Vallibona o Portell.

El propio president de la Generalitat, Ximo Puig, indicó que en la Comunitat, salvo alguna aldea, no había ningún municipio aislado. El diputado de Bomberos, Abel Ibáñez, explicó que el dispositivo se reforzó ayer y priorizó acondicionar las carreteras y los accesos principales a los municipios afectados para «evitar que ninguno de ellos se quede incomunicado». En estas tareas intervienen los 18 camiones quitanieves movilizados. La operativa seguirá como mínimo hasta el lunes y podría ampliarse «unos días» si llega un nuevo frente de frío polar «para aplacar problemas de placas de hielo en las carreteras».

Cortes de luz y teléfono

En Portell, su alcalde, Álvaro Ferrer, denunció que el municipio se quedó sin suministro eléctrico y con fallos en telefonía e internet, «más necesarios que nunca ante emergencias», por lo que instó a invertir más en infraestructUras; al tiempo que expuso que estaban «incomunicados» por carretera con La Iglesuela del Cid, La Cuba, Cinctorres y Vilafranca. Por su parte, en Serratella se quedaron sin línea de teléfono, con fallos en la red fija y sin cobertura móvil de cierta compañía, por lo que el munícipe, Alfonso Arín, pidió que se mejore la antena de conexión y la empresa pague el recibo de luz de la torre. «Es una situación grave; mucha gente es mayor y su única vía de comunicación con familiares o Sanidad ante una urgencia es el teléfono». En cuanto a accidentes, se produjo solamente el vuelco de un camión de la operativa en una cuneta, pero sin heridos. El Consorcio Provincial de Bomberos informó además de la atención a «varios vehículos bloqueados en viales, en Morella, Vilafranca y en la Serratella», con ocupantes que iban a ver la nieve por puro ocio, pese a las peticiones de no circular. En vías principales la circulación fue problemática en la N-232 y A-23. Los 160 camioneros atrapados en Barracas por no poder seguir su ruta se trasladaron al polígono la Esperanza de Segorbe, donde anoche ya les atendió personal de Cruz Roja y hoy llegará otro equipo de voluntarios. La Generalitat eliminó ayer la limitación horaria de hostelería de áreas de servicio para atenderlos.