Semana negra en lo que se refiere a negocios emblemáticos de la ciudad de Castelló. Tras el cierre del Bar Urbano, ahora el que ha bajado la persiana es Sánchez Fotógrafos, tienda con la friolera de 80 años de historia, que abrió en 1941 Antonio Ramón Sánchez López y que heredó el matrimonio formado por Juan Ángel García y Dorín Sánchez, quien ha cerrado finalmente por su jubilación. 

Entre las caras conocidas que han pasado por las cámaras de esta pareja se encuentra la del rey emérito Juan Carlos I, al que siguieron durante 1976 en su visita a la capital de la Plana, así como multitud de políticos o famosos. Sin embargo, para Dorín sus personajes favoritos han sido estos: “Para mí los importantes son los que han venido a la tienda para hacerse una foto de carnet o para inmortalizar su comunión o boda. Han pasado familias enteras, desde abuelos a padres, hijos, nietos… Esta semana aún ha venido alguno a sacarse su última foto”.

Juan Ángel y Dorín han gestionado el negocio de la Calle Colón hasta la jubilación de ambos. ÁNGEL SÁNCHEZ

Después de crecer en este céntrico negocio Dorín no oculta su pesar por el cierre, aunque a sus 68 años siente que ya se ha ganado poder dar un paso al lado: “Siempre hemos dicho que no queríamos hacer bodas siendo mayores, que los jóvenes también tienen derecho a trabajar. Me da pena después de tanto tiempo y echaré de menos a los clientes, pero me quedo con la satisfacción de haber podido trabajar hasta el último día”.

La protagonista de esta historia recuerda que “en épocas buenas se podían hacer hasta 30 ó 40 bodas por temporada, así como muchísimas comuniones”, pero no ocultaba que en los últimos años se bajó este ritmo: “Hay que trabajar bien y con comodidad”. 

Futuro incierto para el local

Situado en pleno centro de Castelló, a la pregunta de qué sucederá en ese número 15 de la Calle Colón a Sánchez Fotógrafos, Dorín admite desconocer el futuro: “El local es de los tres hermanos. Ya veremos qué haremos con él porque no lo hemos hablado todavía”. Por de pronto, eso sí, después de tantos años detrás de las cámaras se tomará junto a su marido un merecido descanso: “Lo primero que haremos será irnos de viaje a descansar”.

Pasando de lo que va a pasar a lo que pasó, la hasta ahora gerente de Sánchez Fotógrafos recuerda los inicios de un apellido que ha llevado “con mucho orgullo” y que mantendrá también en lo que a la fotografía se refiere su hermano, Ángel Sánchez, conocido reportero gráfico de Castellón. “La tienda la abrió mi padre, Antonio Ramón Sánchez López, junto a su madre. Después la heredó mi marido, Juan Ángel, que se jubiló hace dos años, y yo he trabajado aquí hasta esta semana”.

Recuerdos de una familia dedicada a la fotografía en un emblemático establecimiento que dice adiós en la capital de la Plana. ÁNGEL SÁNCHEZ

Al margen de Dorín y Ángel Sánchez, dos tíos de ambos también abrieron sendos negocios de fotografía en Castelló: Galart y Vicente Sánchez. Cuestionada por las razones de esta pasión familiar por la imagen contesta lo siguiente: “Todo viene de mi bisabuelo, Ramón Sánchez del Moral, que en 1885 iba de pueblo en pueblo haciendo fotos a la gente. Como no había negocio suficiente para abrir un estudio eran fotógrafos itinerantes”. Y la profesión fue pasando de padres a hijos como bien saben los cientos y miles de clientes que han pasado por este negocio que se despide después de 80 años de vida.