La única nota positiva del último partido del Castellón en Segunda de la temporada 2020/21 fue el debut en La Rosaleda de dos de los jugadores con mayor proyección de la cantera albinegra: Koke y Aarón Romero. El primero fue titular, con el dorsal 33 a la espalda, y estuvo 66 minutos sobre el terreno de juego, cuando fue sustituido por Josep Señé. «No fue el mejor día para debutar, pero es algo con lo que sueñas desde pequeño. Por una parte te vas jodido con el resultado y por cómo ha acabado todo, aunque por otro lado, contento por haber podido debutar y hacerlo junto a Aarón Romero, un amigo y un compañero de equipo». 

Precisamente, este último (capitán del filial albinegro) ya se había estrenado en un partido de Copa a las órdenes de Óscar Cano, pero en Málaga disputó sus primeros minutos en LaLiga, una circunstancia que le hizo «muy feliz» al poder cumplir un sueño y hacerlo con el Castellón el club en el que ha estado «toda la vida».

A por el ascenso a Tercera

La temporada ha llegado a su fin para el primer equipo, pero tanto Koke como Aarón aún van a seguir compitiendo con el filial orellut, con el que van a pelear por ascender a Tercera División antes de seguir poniendo su granito de arena con el primer equipo para devolverlo al lugar que se merece, el fútbol profesional.

«Intentaremos aportar nuestro granito de arena tanto Koke como yo para ayudar al equipo y devolver al Castellón al fútbol profesional, pero antes tenemos también un reto con el amateur, ya que estamos a nada de disputar el play-off de ascenso a Tercera y, como capitán, tenemos que hacer lo posible para subir», afirmó Aarón, con el que compartía opinión Koke. «Tenemos que intentar lo más rápido posible devolver al club donde se merece estar, que es en el fútbol profesional, pero ahora toca centrarse en el amateur, a ver si podemos subir», indicó el canterano.