El alcalde de Morella, Ximo Puig, defendió que la lucha para evitar la paralización del parador es fundamental porque “nos jugamos mucho con la construcción de esta instalación y hay que salvarla”.

Puig argumentó que esta infraestructura turística “es sinónimo de empleo y más actividad para nuestra municipio y para toda la provincia, por lo que ahora el Gobierno central no la puede detener bajo ningún tipo de concepto”.

Y es que la historia del proyecto hotelero se remonta a hace 40 años, cuando se empezó a hablar de que la capital de Els Ports podría albergar un establecimiento con encanto y de primer nivel. Desde entonces, el proyecto ha pasado por muchos momentos de dificultades y retrasos que ahora viven otro capítulo.