La plaza Na Violant d’Hongria, sita en la playa de Moncofa, fue el escenario elegido por el área de Igualdad del Ayuntamiento para llevar a cabo una edición más de la Festa de l’Orgull LGTBI+, que se celebró ayer sábado por la tarde. Evento que contó con representación de diversos colectivos LGTBI.

Los actos fueron organizados y convocados por el consistorio, con la colaboración de LGTBI Castelló y la Diputación. Lola Alós, concejala de Igualdad, explicó que «ha sido una cita reivindicativa, pero también una fiesta que ayuda a sensibilizar a todas las personas que se ven representadas en estos colectivos y que necesitan la visibilidad necesaria para formar parte de forma normal en la sociedad».

Las actividades arrancaron con el sonido de una batucada, que fue todo un éxito implicando a todos los presentes. Seguidamente, se pasó a leer los manifiestos, a cargo de las entidades participantes y de las instituciones. Para finalizar, la música fue protagonista con el concierto A ferrebombori.

El alcalde, Wences Alós, no faltó a la propuesta y estuvo acompañado por miembros de la corporación municipal y recalcó que «pese a que contamos con restricciones sanitarias por el covid y que los actos se han centrado en la plaza Na Violant d’Hongria, ha habido una buena asistencia de público que, como no podía ser de otra manera, ha guardado todas las medidas sanitarias vigentes».

Cabe destacar que al principio de las actividades, la Policía Local le hizo entrega al primer edil y a la edila Lola Alós de un escudo del cuerpo de seguridad, con un emblema LGTBI. Una muestra más de que el colectivo policial municipal está totalmente implicado en la defensa de estos colectivos. El munícipe agradeció dicha concienciación y mostró el máximo interés en «luchar para tratar de erradicar los problemas que están sufriendo personas que tienen distinta orientación sexual».

‘In memoriam'

Por otro lado, se aprovechó la celebración para guardar un minuto de silencio por el reciente asesinato homófobo de Samuel Luiz, un joven sanitario gallego de 24 años, víctima de un delito de odio. A raíz del crimen, se leyó un poema que le ha dedicado el poeta Julio García Caparrós, vinculado con Moncofa.