Largos días y muchos meses en el centro sin ver a sus familias y sin relacionarse con nadie , a lo que se le sumaba una gran incertidumbre por la pandemia. Los 45 usuarios de la Residencia y el Centro de Día El Collet de Benicarló han mejorado su calidad de vida a través de una terapia equina, mediante contacto con caballos en plena naturaleza.

Vicenta Burriel, secretaria de la asociación Afare, la asociación que promueve la iniciativa, y madre de una de las usuarias, señala que “los familiares podemos participar en las sesiones y estamos contemplando que la terapia es efectiva y que nos permite disfrutar con nuestros hijos e hijas".  Además, añade: “cuando vi que mi hija estaba paseando el poni con su padre me emocioné y fue una experiencia muy positiva”, relata.

El colectivo al que se dirige la propuesta se considera de alto riesgo y les afectó de forma notable el nivel de relación y socialización por el covid. Ante esto, la dirección del centro detectó la necesidad de incluir una actividad al aire libre que ayudara a mejorar el estado anímico de los usuarios. Gracias a la Asociación de Familiares de la Residencia y Centro de Día El Colle (Afare), el Ayuntamiento de Benicarló y la ayuda de CaixaBank fue posible activar esta alternativa.

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45 usuarios del Collet de Benicarló participan en un proyecto terapéutico con caballos. Adriana López

"Salir del ambiente residencial, peinar los caballos, pasearlos y mimarlos ha resultado ser una experiencia muy enriquecedora para todos y todas", como resalta la edila de Bienestar Social, Gemma Cerdà.

Una furgoneta del OACSE transporta a los residentes hasta las instalaciones y los propios educadores sociales, auxiliares y cuidadores se encargan de cubrir todas las necesidades durante la actividad.

Proyecto de futuro

Desde hace 3 meses, el Collet desarrolla este proyecto terapéutico, que consta de dos sesiones semanales, una para los usuarios del centro de día y otra para los de la residencia. La directora de los centros del Collet, Mar Espinosa, asevera que "con esta terapia se trabaja la estimulación a todos los niveles, social, cognitiva y física, una serie de habilidades que ayudan a desarrollar las necesidades básicas de comunicación".

La gente que participa en las jornadas se encuentra en una franja de edad comprendida entre los 18 y 65 años. La terapia se realiza en grupos burbuja con medidas de prevención anticovid, pero cabe destacar que ahora la actividad se encuentra pausada por cuestiones climáticas hasta septiembre, que se retomará en las instalaciones de Equi Lliure, en Càlig.

Aprendizaje y diversión

"Una interacción positiva, donde los familiares disfrutan mucho de la terapia con encuentros con los residentes y permite compartir experiencias nuevas con sus hijos, hermanos o amigos", concluye Espinosa. Con esta iniciativa se pretende mejorar el estado físico, psíquico y la máxima autonomía y socialización de los usuarios y, a la misma vez, disfrutar de un espacio de encuentro de usuarios con familiares que les reconforte emocionalmente.

Familiares y usuarios sonríen de nuevo juntos, rodeados de caballos y combinando el aprendizaje con la diversión, ya que disfrutan de los animales y de la naturaleza, aprenden a respetar los tiempos de espera, a seguir órdenes, a pedir ayuda, y trabajan la movilidad al aire libre.