El Ayuntamiento de Morella solicita a la Dirección de Medio Ambiente de la Consellería de Agricultura, Desarrollo Rural y Transición Ecológica de la Generalitat Valenciana, declare reserva de fauna silvestre la balsa del Pla de les Bassetes del monte de Vallivana, donde se ha detectado la presencia de Triops cancriformis. Esta especie ya existía hace 250 millones de años en los estancos como demuestran los estudios y, por tanto, hay que protegerla y evitar su extinción. Así, en los ejemplares de Morella no se aprecian diferencias de los fósiles del Pérmico.

Así, se pretende proteger el plano de las balsas, ya que es un espacio de pequeña extensión con poblaciones excepcionales de especies de fauna silvestre y albergar, temporalmente, las fases vitales críticas para su supervivencia. Además, se trata de un espacio de titularidad pública y esta declaración le otorgará unas normas de protección en las que se determinarán las medidas de conservación a adoptar y las actividades que se deberán regular.

El concejal de Desarrollo Rural y Medio Ambiente, Joel Pascual, ha destacado que "se ha localizado esta especie anterior a la existencia de los dinosaurios en el monte de Vallivana, dentro del término de Morella, la que hay que proteger y garantizar su supervivencia". El edil ha explicado que "la declaración de reserva de fauna silvestre es totalmente compatible con los diferentes usos de este monte público, así como el aprovechamiento de sus recursos" y ha añadido que "el plan de las balsas cuenta con las características idóneas para que se pueda reproducir el Triops cancriformis cuando baja el nivel del agua en la zona".

Hay que explicar que el monte de Vallivana ya cuenta con otra zona de reserva de fauna silvestre para el gallipato, ubicada en la balsa que encontramos ante el santuario. Esta es una especie endémica de la zona, la cual también está protegida.