Las quejas vecinales descendieron en el último año un 29%, mientras que en los casals cayeron hasta un 35%. Así se desprende de la memoria anual del 2021 de la Policía Local de Onda, que también revela que el número de robos ha bajado a la mitad desde 2018, pasando de 89 a 45 denuncias, según informaron fuentes municipales.

Esta evolución favorable responde al refuerzo de los efectivos policiales, ya que ampliaron la plantilla hasta los 53 efectivos, así como al incremento de las campañas de vigilancia, que las duplicaron respecto a 2020 hasta llegar a las 401 controles de alcoholemia, drogas, velocidad, uso del cinturón, documentación de vehículos y otros. Como consecuencia de esta medida, subió un 42% el número de denuncias por alcoholemia o drogas; y un 7% por tenencia o consumo de estupefacientes.

El documento también destaca la labor humana y asistencial de la Policía Local, al atender a 662 vecinos en casos de asistencias a menores y mayores, enfermos mentales, personas ebrias, acoso, accidentes laborales, mediaciones vecinales, personas desaparecidas o por fallecimiento, entre otras.

Hay que subrayar que los agentes invirtieron durante el año pasado más de 1.500 horas de formación para estar mejor preparados cara a responder a las emergencias, en aspectos como violencia de género, reconstrucción de accidentes, defensa personal, medio ambiente o protección animal.

«Trabajamos por hacer cada día una ciudad más segura desde la concienciación ciudadana y el servicio policial cercano, y para ello tenemos que invertir en campañas de sensibilización y en la mejor preparación de nuestros agentes», apuntó el edil de Seguridad Ciudadana, Óscar Valero.

Por su parte, el comisario de Policía, Miguel Ángel Izquierdo, resaltó «el esfuerzo y profesionalidad a diario de toda la plantilla para hacer de Onda una ciudad más agradable para vivir».