El Ayuntamiento de Onda, en su objetivo de luchar contra el cambio climático y construir una ciudad más sostenible y eficiente, mejora el sistema de climatización de la tercera planta de la Casa de la Cultura en una intervención con un presupuesto de 87.969 euros. 

El proyecto, cofinanciado por el Ayuntamiento y los planes Feder de la Unión Europea, se enmarca en el plan Smart City, que pretende hacer de Onda un municipio cada vez más inteligente. 

Auge de la domótica

La finalidad de esta medida es mejorar la eficiencia de los sistemas de climatización, a través de la gestión domotizada, lo que contribuye a la reducción de emisiones de gases efecto invernadero y ahorro de energía en el ámbito urbano, además de favorecer la productividad de los trabajadores. Con ello, la calificación energética de los edificios podrá pasar de D a C.

No en vano, fuentes municipales destacan que la mejora de la eficiencia energética provoca un ahorro en términos económicos de 1.156,13 euros al año por los equipos de climatización. En términos de sostenibilidad, se logra la retirada de estos equipos que trabajan con gas R22, cuyo uso está prohibido en la actualidad.

Por otro lado, según datos obtenidos de la auditoría energética del edificio del centro integral de mayores, las emisiones de CO2 se ven reducidas en casi 12.000 kilos de dióxido de carbono al año. El consumo de energía primaria disminuye más de 84.000 kWh/año.

La mejora del sistema de climatización supone un importante ahorro de emisiones al año. Mediterráneo

Beneficio para usuarios, trabajadores y vecinos

Esta operación no solo beneficia de manera directa a los usuarios y empleados que desarrollan su trabajo en los diferentes edificios públicos, sino también, de manera indirecta, redunda en toda la ciudadanía en la reducción de los consumos energéticos y en la facturación del consumo de energía eléctrica que debe abonar la Administración local.

Los objetivos de la actuación son favorecer el paso a una economía de bajo nivel de emisión de carbono en todos los sectores y la mejora de la eficiencia energética y aumento de energía renovable en las áreas urbanas. Además del fomento de estrategias de reducción del carbono para todo tipo de territorio, especialmente las zonas urbanas, incluido el fomento de la movilidad urbana multimodal sostenible y las medidas de adaptación con efecto mitigación. 

Los edificios de uso público presentan unos consumos de energía elevados que tienen una repercusión importante en los presupuestos municipales (cerca del 4% de los mismos corresponden a consumo de energía).