Juanjo Artero es uno de los rostros más conocidos de la pequeña pantalla gracias a sus papeles en series que han marcado un hito en la televisión, como El comisario, también El barco o más recientemente Servir y proteger. Este sábado, 9 de abril, participa en el Festival Castelló Negre en dos encuentros, en Orpesa y Almassora, en los que hablará de cómo es «meterse en la piel» de un comisario.
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Repites presencia en Castelló Negre. No sé si te consideras una especie de «padrino» del festival.
Ojalá. Que cuenten conmigo es maravilloso. La vez anterior fue muy interesante, aunque lo de «padrino»... Tampoco creo que sea para tanto –se ríe–. Yo encantado de poder participar y de volver a Castellón, es una tierra que me encanta, tengo muchos amigos aquí.
Ofreces hoy dos charlas en Orpesa y Almassora. ¿Qué vas a plantear en ellas?
Básicamente, voy a exponer mi vida como actor en relación al cine negro y policiaco. Quiero transmitir un poco el trabajo del actor, desde la preparación del guion y cásting, la complicación que puede conllevar la creación de un papel... Lo interesante es poder conversar con el público.
El género negro de ficción nos ha ido acercando a una realidad que muchas veces no solemos o no queremos ver. Tú, como actor en series policiacas, eres más conocedor de todo ello, ¿no?
Cierto es que conoces esa otra parte algo más profundamente, desde la pequeña a la gran delincuencia, porque has de dar veracidad a tu papel.
¿Cómo preparas un papel así, que tiene que enfrentarse a situaciones de tensión e injusticias?
Cuando estás en el «lado correcto» de la ley, como es el caso de mis guiones, primero tienes que ver qué tipo de personaje vas a interpretar, cómo se mueve dentro del entorno. Luego pasas a las características más específicas, al apartado corporal. Digamos que cuando lo entiendes de mente, lo entiendes de cuerpo. Pero primero busco su forma de pensar y de ser, su columna vertebral.