Con Portugal en las semifinales ya podía estar feliz, pero si por casualidad la selección lusa tumba a la campeona del mundo, el superagente Jorge Mendes (Lisboa, 1965) volverá a tener un verano triunfal. El representante más famoso del planeta cuenta en su nómina con 10 de los 11 titulares. Solo el centrocampista Moutinho, del Oporto, se escapa de su galaxia. Incluso el seleccionador Paulo Bento pertenece a la empresa Gestifute, gestionada por el amigo de José Mourinho, a quien considera casi un hermano.
No es fácil escapar al embrujo del Tiburón Mendes, que partió de la nada y ha montado un imperio empresarial impresionante. Sigiloso, inteligente y opaco, el agente más influyente convierte en oro todo lo que toca. Fundó su empresa en 1996 con unos pocos ojeadores y futbolistas casi desconocidos. Hoy cuenta con una bolsa de 80 jugadores, acuerdos estratégicos con compañías de todo el mundo y unos niveles de capitalización insuperables en el sector. El gobierno portugués, incluso, le concedió la medalla de honor al mérito deportivo el pasado mes de mayo.
relación con Florentino // Esquivo a la prensa y sutil en sus maniobras, Mendes fundamenta su éxito en una telaraña de contactos. Su relación, por ejemplo, con el presidente del Real Madrid, Florentino Pérez, es muy estrecha, pero también con Augusto César Lendoiro (Deportivo), con quien firmó su primera operación en España. Miguel Ángel Gil Marín, del Atlético de Madrid, tampoco escapa de su influjo, que se extiende por toda la Premier League, con especial cariño hacia Peter Kenyon, exdirector ejecutivo del Chelsea.
Mendes trabaja desde la base. Le encanta convencer a futuras estrellas con su arte de la palabra y una cuidada gestión de la imagen. “Mis jugadores son sagrados. Ellos me adoran y mi objetivo es protegerlos, pero también a los clubs”, asegura. Él adora el cine (montó un videoclub en su juventud), los trajes oscuros de clase alta y los buenos coches, distintivos del estatus que ha alcanzado con sus operaciones. Entre sus modalidades de negocio destacan ahora los fondos de inversión, que ha aplicado en clubs a la desesperada como el Zaragoza. Agapito Iglesias, uno de los hombres más odiados en Aragón, también ha caído en las manos de Jorge Mendes. Solo así podría haber traído al meta Roberto en una polémica operación.
En la Eurocopa ya se ha visto a Mendes sonriendo en los palcos junto a su admirado Mou. Ahora se frota las manos con lo que vendrá después del torneo. Con los 10 titulares de la selección ya ha firmado transacciones valoradas en 266,5 millones de euros. La cifra sería mayor si estuviesen Bosingwa y Carvalho, que abandonó enojado una concentración y fue señalado por Bento.
La mina blanca // El Real Madrid ha supuesto una mina para Mendes, que ha firmado seis operaciones con el club blanco por un total de 197 millones de euros: Mourinho (8), Cristiano Ronaldo (96), Fabio Coentrao (30), Pepe (30), Di María (25) y Carvalho (8). El técnico tampoco vería mal el fichaje de Raúl Meireles, el centrocampista de los tatuajes y los peinados extravagantes.
Solo cuatro jugadores del combinado luso y los dos porteros suplentes están fuera de la órbita de Mendes, que habla 16 horas diarias por teléfono. El agente ya medita nuevas operaciones para salir lo mejor parado posible. El portero Rui Patricio, el único titular con el que aún no ha hecho negocio, está en el escaparate. Formado en la cantera del Sporting de Portugal, figura en la agenda del Manchester United. Nani es otra de las bazas del Tiburón para hacer caja, ya que no está a gusto en el club de Old Trafford, que pagó 25,5 millones por el extremo. No le faltarán ofertas.
Bruno Alves, el central del Zenit pretendido por la Juventus, y Miguel Veloso, que está brillando en la Eurocopa tras un pobre año en Génova, pueden deparar buenos dividendos. Cualquier nombre se relaciona con Mendes. Se lesionó Postiga, del Real Zaragoza, y le suplirá Almeida, otro jugador del superagente, que triunfó en el pasado con un suplente de esta selección como Quaresma y un gran ausente (Simao).
El empresario planea su estrategia con el efecto dominó que le caracteriza. El Real Madrid es su principal destinatario, pero mira en todas las direcciones. Radamel Falcao fue su gran pelotazo del verano pasado y la maquinaria jamás se detiene. Todo es posible en el universo Mendes. H
