Miguel Álvarez, que es el entrenador más veterano de todo el grupo 2 de Primera RFEF, las ha visto de todos los colores en toda su dilatada trayectoria en los banquillos. Sabe que lo que hoy es blanco, mañana igual es negro. Por eso, ante el fantástico arranque del Villarreal B, tiene los pies en el suelo para evitar que la corriente de la euforia les gaste una mala jugada. «Hay que tener calma», pidió después de sumar seis puntos de seis posibles. «Es cierto que es para estar contento», agregó. «No debemos sacar pecho ahora, porque igual después nos sacan chepa, según mi experiencia...», dijo con ironía. 

Su equipo derrotó primero al San Fernando (1-3) y, después, al Cornellà (3-0). Suma seis puntos, los mismos que el Atlético Baleares, su próximo rival, el domingo a las 12.00 horas en el Estadi Balear. «Toca seguir igual, sin bajar la guardia. En el momento que nos relajemos, los rivales nos bajarán a la tierra si nos lo creemos», recalcó. «Ahora llegan partidos complicados y bonitos de jugar, como el Atlético Baleares, Albacete, Costa Brava o Sabadell», destacó el preparador jienense. 

Inicio prometedor

Seis puntos, seis tantos marcados en dos partidos y solo uno encajado. La joven escuadra 'grogueta' ha generado muchas ocasiones de gol, lo cual se traduce en la media docena de tantos marcados. «En pretemporada ya sucedió lo mismo, pero nos costó más transformar esas ocasiones. Los chicos creen en lo que estamos haciendo y están por la labor de hacer un buen año. Sé que no se saldrán del guion marcado», destacó Álvarez. 

Y es que, como de vez en cuando recuerda el entrenador del filial amarillo, «esta categoría es muy exigente; y en concreto el grupo 2 está muy igualado, porque hay grandes equipos con muy buenas plantillas». «Mínimo hay una docena que no solo están capacitados para estar entre los cinco primeros clasificados, sino que para quedar campeón de grupo», advirtió. «No se puede descuidar nada, porque encima hay cinco plazas de descenso a Segunda RFEF, que también van a estar muy reñidas», explicó sobre el peligro de estar en la parte baja.

El primer filial amarillo ya prepara, en la Ciutat Esportiva Miralcamp, el compromiso del domingo contra el Atlético Baleares. Dos equipos que han hecho pleno, con unos números tremendamente parejos en estos momentos.

Para ese atractivo partido, el primer filial amarillo recuperará a los guardametas internacionales Filip Jorgensen (Suecia) e Iker Álvarez (Andorra). Además, regresará igualmente Nikita Iosifov, de su periplo también internacional con la selección rusa sub-21. Posiblemente ya estará a disposición también Iker Goujón, manteniendo únicamente la ausencia del lesionado Ramiro Guerra.