Sorpresa para la Hacienda española. El Gobierno belga anunció ayer que desde hoy y hasta el 1 de julio enviará al fisco español datos sobre la titularidad de unas 15.000 cuentas de ciudadanos españoles.
La medida forma parte del levantamiento bancario de 250.000 cuentas de individuos de otros países. Del total, unas 100.000 son de franceses, que acudieron generalmente al país vecino para eludir el pago del impuesto sobre grandes fortunas. A estos les siguen los holandeses, con 50.000; los alemanes (22.500) y los británicos y los españoles con 15.000 depósitos cada uno, según publicaba ayer la edición digital de Le Monde.
La decisión supera las expectativas creadas con la directiva europea del ahorro. En virtud de esta, los países que aceptan ocultar la identidad de los titulares de cuentas, ingresan periódicamente cantidades en los tesoros de los países de origen retenidas sobre los rendimientos, según fuentes tributarias.
Esta normativa ganó fuerza tras el estallido de la crisis en el 2008 y los compromisos de países como Francia o Alemania de poner coto a los paraísos fiscales. Bélgica enmarca la decisión dentro del compromiso de combatir los paraísos fiscales. Austria y Luxemburgo mantienen el secreto bancario.
Según datos de la Agencia Tributaria correspondientes al 2009, Bélgica era el quinto país que más dinero aportaba por retención en los rendimientos de cuentas de españoles, con un total de 1,5 millones sobre un total de 55,98 millones.
Una vez que reciba la información, el fisco español podrá comprobar, mediante el cruce de datos, si las sumas que se encuentran en Bélgica se ajustan a los ingresos declarados por los contribuyentes afectados.
