Prácticamente ningún rincón de la Vall d'Uixó es ajeno a estas alturas de la reactivación de las Fallas en la ciudad, después de dos años de ausencia. Música, carpas, petardos y monumentos han tomado las calles desde el viernes por la tarde y hoy han tenido un protagonismo indiscutible en el entorno de las nueve comisiones con las que cuenta la Vall, en una recta final que tiene la vista puesta en el cielo, con la esperanza de que las predicciones meteorológicas no se cumplan o si lo hacen, la lluvia no sea tan intensa como para afectar a las esculturas de cartón piedra.
Este inicio festivo ha contado con una programación cultural plenamente consolidada y con importantes novedades: el Aplec de la Plana, que hoy ha reunido en el municipio a diferentes collas de dolçainers y tabaleters, una muixeranga y otras actividades incluidas en la propuesta organizada por la falla Ja Estem Tots con la colaboración del Ayuntamiento.
La respuesta del público ha estado a la altura de la cita. Tanto los talleres organizados en la plaça Valence d'Agen, centro neurálgico de la actividad de la falla, como el pasacalle de los grupos musicales, han contado con una importante asistencia, que ha denotado las ganas en general de recuperar este tipo de encuentros festivos y culturales.
La programación oficial de la Junta Local Fallera se retomará el lunes con la montà, en la víspera del día de entrega de premios. Si el tiempo lo permite, por primera vez, está previsto organizarla al aire libre, en la plaça del Parc. Como novedad de este año, la JLF será la que decidirá los premios la mejor ninot y la mejor crítica, para que tengan un cariz más local, mientras que el jurado de la Junta Central Fallera se encargará de adjudicar los galardones tradicionales.
