EL 31 DE JULIO DEL 2006 SERÁ RECORDADO COMO UN PUNTO DE INFLEXIÓN, EL DÍA EN EL QUE FIDEL CASTRO FUE OPERADO POR UNA HEMORRAGIA INTESTINAL. NUNCA VOLVIÓ AL PODER.

HEMORRAGIAS

Las hemorragias intestinales que padecía el comandante eran un aviso de una importante infección en el intestino grueso. La solución pasaba por extirpar la parte del colon afectada. De las opciones posibles, Castro descartó la ileostomía, que conlleva la creación de un ano artificial, y optó por la unión de la parte alta del intestino y el recto.

DOS OPERACIONES MÁS

La recuperación fue un fracaso por problemas de cicatrización tan graves que el intestino se rompió y el abdomen se llenó de heces, causando una grave peritonitis. Fueron necesarias otras dos intervenciones, entre las que hubo complicaciones como el rechazo de un ano artificial, el de varias prótesis e inflamación de vesícula.

CIRUJANO ESPAÑOL

Ante las elucubraciones de que Castro padecía cáncer, el cirujano español José Luis García Sabrido le exploró en La Habana y lo descartó.