Porsche amplía la familia Cayenne con una configuración aún más deportiva, el Coupé, que se añade a la tercera generación de este famoso SUV alemán.

Sin duda, lo que verdaderamente diferencia al coupé del resto de la gama es el aspecto exterior. El frontal es prácticamente idéntico al de su hermano, mientras el diseño trasero es el responsable del carácter sport del crossover.

El coupé, que llegará el próximo mes de mayo, es apenas 18 milímetros más largo (mide 4,91 metros), tiene una altura del techo 20 milímetros más baja y a su vez crece en anchura, dando como resultado un coche más estilizado y de apariencia más musculosa e imponente.

Además, este modelo del fabricante de Stuttgart, cuenta de serie con un techo panorámico fijo de cristal. Como opción, se puede sustituir por otro de carbono que potencia el aspecto característico de un deportivo.

Con rivales también de esencia premium como el Mercedes GLE Coupé, el BMW X6 o el Audi Q8, el SUV de Porsche se intenta diferenciar en el apartado mecánico.

Distintivo En su lanzamiento, el Cayenne Coupé dispondrá de dos propulsores. El primero de ellos, el de menor potencia, es seis cilindros sobrealimentado que desarrolla 340 caballos.

En lo más alto de la gama se encuentra el Turbo Coupé. Este modelo monta un motor V8 biturbo de 550 CV capaz de pasar de cero a 100 kilómetros por hora en 3,9 segundos.

En lo que respecta a los aspectos técnicos y tecnológicos, esta variante coupé se beneficia de todos los avances que ya incorpora la tercera generación del Cayenne.

En el habitáculo, el diseño conserva la esencia de Porsche y sigue reinando la sensación de calidad y carácter premium en cada uno de sus acabados.