20.000 agricultores de Castellón tendrán que recortar agua para sus naranjos en plena temporada de riego

Los regantes piden ayudas económicas para poner en funcionamiento los pozos de sequía

20.000 agricultores de Castellón tendrán que recortar agua para sus naranjos en plena temporada de riego

20.000 agricultores de Castellón tendrán que recortar agua para sus naranjos en plena temporada de riego / Manolo Nebot

Elena Aguilar

Elena Aguilar

Era una posibilidad y ahora ya es un hecho. Los regantes de municipios como Castelló, Vila-realAlmassoraBurrianaNulesOnda o l’Alcora van a tener que apretarse el cinturón y gastar menos agua.  La falta de lluvias, que está provocando que los embalses del sistema del Millars estén cada vez más vacíos, ha obligado a la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) a tomar cartas en el asunto y a poner en marcha medidas de ahorro para gastar cuantos menos recursos mejor. Y la más importante es que los 20.000 comuneros de la comarca de la Plana van a tener que ahorrar cada mes un 10% del agua respecto al volumen medio utilizado en los últimos cinco años.

Los recortes en el consumo de agua se acordaron este jueves durante la celebración en la sede de la CHJ de la comisión de desembalse del Millars, un encuentro al que asistieron los regantes del Sindicat Central d’Aigües del Millars y técnicos del organismo que depende del Ministerio para la Transición Ecológica. Tras analizar la situación, y con el objetivo de llegar a finales de octubre (cuando acaba el año hidrológico) con reservas suficientes, se acordó rebajar la cantidad de agua que se utiliza para regar las algo más de 24.000 hectáreas (la inmensa mayoría de cítricos) que se nutren de este río de la Plana. 

El objetivo está claro (las comunidades que cogen agua del Millars consumen anualmente unos 90 hectómetros cúbicos de agua), pero ahora falta por determinar cómo se ejecutará esta medida. Y lo positivo es que serán los propios regantes los que decidirán el cómo y el cuánto. «La Confederación ha aceptado nuestra propuesta de que seamos nosotros los que gestionemos las acciones de ahorro basándonos en un principio de solidaridad entre las comunidades de regantes», explica Pascual Broch, presidente del Sindicat Central d’Aigües del Millars. De esta manera, esta organización hará llegar una propuesta a la CHJ en un plazo de 14 días y, si recibe el OK, se empezarían a aplicar unas restricciones que se prolongarán hasta el próximo mes de octubre. 

Pozos de sequía y sondas

Aunque la hoja de ruta aún no está del todo clara, Pascual Broch apunta a que entre las opciones que se barajan destacan la utilización de pozos de sequía, el uso de sondas de humedad del suelo o acortar los tiempos de riego (de 3 a 2,5 horas, por ejemplo). «Cada comunidad mirará que opción es más viable y entre todas consensuaremos un plan para ahorrar ese 10% de agua», explica el presidente de los regantes que añade que la medida «no es dramática» y tampoco supondrá un desembolso importante para los agricultores.

Pese a que el gasto no será excesivo, algunas comunidades de regantes van a tener que rascarse el bolsillo. Poner en marcha los pozos de sequía, que no se utilizan desde hace años, va a costar dinero, y los agricultores ya han pedido ayudas económicas. «Muchas de estas infraestructuras no tienen luz, otras tienen el motor averiado.... y ponerlas a punto supondrá una inversión. La CHJ se ha comprometido a trasladar esa petición de subvenciones a la Generalitat», explica Broch. Otras de las reivindicaciones de los regantes son incrementar la capacidad del pantano de Arenós y que se dejen de dar nuevas concesiones de agua. 

Suscríbete para seguir leyendo