A pesar de la intención expresa de algunos de los concejales de no repetir el conocido debate sobre el cambio a Castelló como la denominación única de la capital de la Plana, ocurrió. El pleno de junio del Ayuntamiento dio su visto bueno al trámite de abrir la fase de exposición pública sobre el topónimo en el contexto de una nueva bronca con el PP y Cs en contra y los tres partidos del Pacte del Grau --PSPV, Compromís y CSeM-- a favor, en la que no faltaron incluso las retractaciones tras subir el tono del debate.

El edil popular Carlos Feliú insistió en que la normativa no obliga a eliminar el nombre en castellano, y anunció recursos durante el plazo de 20 días que se inicia ahora. Llegó a utilizar el término nazi para ilustrar su tesis de que el equipo de Gobierno impone la decisión, en alusión al portavoz de Compromís Ignasi García, que defendió la postura del equipo de gobierno, si bien retiró sus palabras tras la intervención de la alcaldesa, Amparo Marco.

Garcia tachó la petición del debate sobre el tema por parte del PP de nueva operación de «acoso» al ejecutivo local, criticó a los populares por «difamar» y «enfangar» a los cronistas de la ciudad y expertos que han elaborado los informes que avalan el uso exclusivo de Castelló, y les interpeló sobre por qué han usado el nombre en castellano en exclusiva durante 20 años si ahora defienden la opción bilingüe.

Desde CSeM, Xavi del Señor recordó, por su parte, que el debate sobre la cuestión «fue la semana pasada». El edil de Ciudadanos, Vicente Vidal, hizo en su caso observaciones subidas de tono, por las que después se disculpó, además de tachar de «chorrada» la cuestión del topónimo.

Este término también fue utilizado por Amparo Marco, quien rectificó después, en relación con otro tema recurrentes de debate, los conflictos en torno a las fiestas de la ciudad y sus órganos de gestión, por una intervención de la edila del PP María España en relación con una modificación de crédito de 4.000 euros relacionada con la Cofradía de Lledó.

La aprobación unánime de los precios de las publicaciones municipales dio lugar a una discusión entre la edila Patricia Puerta y el popular Vicent Sales, y la moción del PP, aprobada también, para que haya mayor participación ciudadana en la elección de los proyectos con fondos europeos Edusi fue un punto de fricción. Otra iniciativa de este partido para el cierre de la Cosa Nostra, sobre la que se esperaba tensión, fue retirada por la portavoz, Begoña Carrasco.