La Diputación ha iniciado ya el trabajo de campo de prevención y tratamiento contra los mosquitos, que el verano pasado se convirtieron en una auténtica plaga, a través de la geolocalización de posibles focos de proliferación de larvas e insectos. El diputado de Desarrollo Sostenible, Mario García, ha supervisado estas tareas en municipios como Almenara, Xilxes, la Llosa o la Vall d’Uixó y que continuarán, de sur a norte, hasta la primera quincena de marzo en todos los municipios del litoral para desplazarse al interior.

“Una vez hemos concluido las jornadas técnicas con los municipios y habiéndoles proporcionado herramientas para que desde el ámbito administrativo puedan continuar el trabajo, ahora iniciamos la fase de trabajo de campo. Estas visitas que estamos haciendo junto a los técnicos de la Universitat de València con la que ya hemos firmado un convenio permitirán realizar un mapeo para tener ubicados todos los focos de peligro de proliferación”, según argumenta García.

De forma paralela a estos trabajos, la Diputación está ultimando un borrador de bases para las ayudas a los municipios, para lo que ha presupuestado 400.000 euros. Antes de aprobar las bases, la corporación provincial volverá a convocar a los ayuntamientos (cuando acaben la Magdalena y las Fallas) “con tal de recoger ideas y sugerencias que enriquezcan nuestra propuesta, pues no vamos a hacer nada que no esté consensuado”, apunta García.

El diputado recuerda que la institución está “a la espera de que la Generalitat diga cuánto dinero va a poner y cómo va a actuar”. “Su falta de respuesta nos preocupa especialmente en el caso de las zonas protegidas, pues tenemos varios espacios de mucha superficie. Por ello, esperamos que la Generalitat abra una línea específica para este tema compatible con la de la Diputación”. H