Curiosa la situación que se da en la provincia. A pesar de que hay más agua embalsada que el año pasado a estas alturas (18,5 hectómetros cúbicos, hasta superar los 94), el sector primario sufre la falta de agua, lo que está aumentando de forma notable los costes que debe asumir.

La ausencia de lluvias y las elevadas temperaturas están provocando que, para la ganadería extensiva (animales en semilibertad) «no hay hierba», denuncia el secretario general de la Unió, Ramón Mampel, con lo que los ganaderos deben recurrir al forraje para alimentar a los animales. Esto está focalizado sobre todo en Els Ports, una zona que suele sufrir periodos de sequía, y donde el año pasado «solo nevó una vez, con lo que no se recargaron los acuíferos», se lamenta Mampel.

Este «déficit importante» también se contagia a la ganadería intensiva (la que se desarrolla en granjas), donde «los animales tienen que beber... y con este calor, más». Esto está provocando un alza en los costes de las granjas de porcino y aviar, grandes consumidoras de agua, afirma.

la tierra, seca // Pero no solo el subsector ganadero sufre esta problemática. También los agricultores han visto cómo aumentan sus gastos. De hecho, para el cultivo de la naranja, la falta de las antaño habituales lluvias de septiembre y octubre ha motivado que se tenga que regar más en el periodo en que la fruta ha de coger calibre. «Aunque el agua sea gratis porque es del río, se necesita electricidad para llevarla hasta el huerto», apunta el responsable de cítricos de Fepac-Asaja, José Francisco Nebot.

Esto, unido a otros factores, ha hecho que los costes de cultivar una hanegada de clementinas superen los 400 euros, señala.

En cuanto a otros cultivos, Mampel apunta que en el Maestrat «ha caído oliva y la que se ha quedado en el árbol es pequeña». A la sequía que ha sufrido el olivo, el dirigente de la Unió suma que el cereal que está sembrado «si no llueve, no germinará».

Estos problemas están también centrados en la parte norte de la provincia. Una zona que, según el último informe de seguimiento de la sequía de la Confederación Hidrográfica del Júcar, está en prealerta. Solo otras dos de la CHJ están en esta situación.