El Grup per a la Recerca de la Memòria Histórica de Castellón insistió ayer, en base a un informe elaborado hace meses y del que ya se había hecho eco este periódico, que «en la ciudad de Castellón pervive en el centro, ubicada en un parque que es patrimonio cultural y natural, una cruz de los caídos que, desde su inauguración en el año 1944, ha sido lugar de exaltación del franquismo, de la sublevación militar y de sus héroes, y mártires, y de marginación hacia las víctimas del franquismo y los vencidos en la guerra».

Además, reiteran que «el espacio público no puede exaltar ni recordar un periodo oscuro y violento de la historia, sino representar valores de la paz y de una sociedad democrática, incompatible con cualquier tipo de exaltación de la violencia y de simbología franquista en las calles, plazas o parques», argumentan.

URGENCIA // Por ello, desde el Grup per a la Recerca de la Memòrica Histórica de Castellón, consideran «urgente la desaparición de este símbolo del espacio público de Castellón» e instan a ejecutar su retirada «a la administración local, la misma que en el año 1940 elaboró y costeó el proyecto de la cruz del Ribalta», dicen.