La alcaldesa de Castellón, Amparo Marco, está visitando todos los distritos de la ciudad con el objetivo de atender las demandas de los castellonenses, revisar proyectos en marcha y activar las obras o iniciativas necesarias para dar solución a los problemas del día a día. «La gestión política más eficiente es aquella que se realiza a pie de calle, escuchando a los vecinos y vecinas y analizando directamente aquello que falta en cada barrio, calle, plaza o parque de la ciudad», aseguró, consciente de que el microurbanismo es una vía para mejorar la calidad de vida de la ciudadanía.

En su mayor parte se trata de actuaciones de menor entidad que los servicios técnicos estudian y afrontan en función de las características técnicas y de la disponibilidad presupuestaria.

NECESIDADES // «Desde que accedimos al gobierno municipal, hemos sido conscientes de la necesidad de tener en cuenta las necesidades de los distritos, con el objetivo de dar solución a deficiencias que se arrastran desde hace muchos años», explicó la primera edila. «Las vecinas y los vecinos cumplen con su responsabilidad de exigirnos que mejoremos la ciudad, porque para eso se nos ha elegido», manifestó.

En las últimas semanas, la alcaldesa ha centrado la atención en los distritos Sur y Norte, desde donde se han recibido propuestas de actuación desde la ciudadanía. En el primer caso, por la avenida de Almassora, plaza Illa Baleato y el grupo San Andrés, se atendieron las peticiones de ajardinamiento de plazas y colocación de juegos infantiles, mientras que en las urbanizaciones de montaña, como Tossal Gros, se estuvieron analizando mejoras en el transporte público y obras de adecentamiento del barrio.

CON LOS TÉCNICOS // Marco visita los barrios acompañada por técnicos municipales del área de infraestructuras. «Las peticiones directas de las personas residentes en estas zonas están siendo asumidas y se van abordando de manera progresiva», apunta la munícipe y si bien las aportaciones vecinales permiten actuar con más rapidez cuando se transmite directamente un problema puntual, hay otras vías abiertas para poder hacer llegar las demandas. Así, las preocupaciones y sugerencias llegan hasta la alcaldía por correo electrónico, redes sociales y los buzones y urnas instalados en tenencias de alcaldía e inmuebles municipales.

Las peticiones suelen ser coincidentes: más árboles o bancos, juegos infantiles, mejora del asfaltado, aceras y alumbrado o repintado de la vía pública, arreglo y mantenimiento del mobiliario urbano y limpieza más intensiva, entre cualquiera otra reivindicación ciudadana que sea competencia del Ayuntamiento.

El microurbanismo ha sido una de las cartas de presentación del actual equipo de gobierno, que ha priorizado las intervenciones puntuales a los megaproyectos, cosiendo así la ciudad. Hay que recordar que recientemente en sesión plenaria se aprobó un plan de obras específico para los barrios con el que planificar a corto, medio y largo plazo, los proyectos a desarrollar en cada barrio. En el presupuesto municipal recién aprobado se ha incluido y ahora faltará dotarlo de contenido y desarrollarlo.