La segunda medusa más urticante del Mediterráneo ha aparecido en las costas de Castellón. Decenas, por no decir miles, de pelagias noctilucas han aparecido durante los últimos días entre las costas de Orpesa, Benicàssim y Castellón. Se trata de ejemplares de color rosa y violeta, de tamaño pequeño y mediano, que aparecen en forma de bancos y enjambres. Tienen varios tentáculos, algunos de ellos de gran longitud, aunque sus umbrellas son de menor tamaño que los de otras especies más conocidas.
Según han confirmado a Mediterráneo fuentes del Oceanogràfic de València, se trata de la llamada Pelagia Noctiluca o Medusa Luminiscente. Miguel Candelas, biólogo de este centro, explica que estamos ante la medusa del mediterráneo más urticante, por detrás de la carabela portuguesa. «Puede producir picaduras muy fuertes en las personas, dependiendo de la zona de roce con el cuerpo humano, especialmente en las áreas que son más sensibles, por lo que se recomienda evitar entrar en contacto con ellas bajo ningún concepto».
Asegura que «en esta época están apareciendo bastantes, ya que posiblemente debido a la acción de los vientos de levante y a las corrientes marinas se están acercando a la costa. Es la época en la que suelen hacer acto de presencia». Y señala que las medusas tienen diferentes meses de aparición y en ahora suele hacerlo esta especie concreta.
NO TIENE POR QUÉ SER UN VERANO INFESTADO DE MEDUSAS
Su proliferación en estas fechas no tiene por qué ser un indicativo de que vaya a resultar un verano de plagas de este tipo de animales. «No quiere decir que las condiciones sean más favorables este año», manifiesta este experto.
CONDICIONES FAVORABLES A LA PLAGA
«Sí puede ser que hayan aparecido algunas más o que haya habido condiciones más favorables para que se hayan reproducido en mayor medida», indica. «Al final son un conjunto de condiciones y parámetros los que pueden incidir en la mayor o menor presencia de estos seres, como pueden ser, además de los vientos y las corrientes, la temperatura marina y la abundancia o escasez de depredadores naturales». Entre los animales que se alimentan de ellas están los peces luna, las tortugas marinas o los atunes. «Si hay cada vez menos tortugas porque están amenazadas, puede influir en que proliferen más porque tienen menos competidores», dice. A ello se une también el que las redes sociales hacen que se ponga en conocimiento muy rápido. Así, la noticia de su aparición se ha viralizado por Whattsapp y Facebook.
Hace unas semanas también tuvo eco la aparición en aguas de Alicante y Girona bancos de veleias y carabelas portuguesas.
