El president de la Generalitat, Ximo Puig, reclamó al Gobierno de España que adapte cuanto antes a la legislación española la directiva europea sobre la cadena de valor, porque es «incomprensible» la diferencia entre el precio que se paga al agricultor y lo que abona el consumidor en los mercados.

«Tenemos que garantizar una vida digna para los agricultores, porque sin ellos no habrá agricultura», afirmó Puig en la Vall d’Uixó, donde por la mañana le preguntaron por las movilizaciones en defensa del sector citrícola. El president reconoció que los productores «tienen razón de estar indignados».

La Diputación apoyó las protestas, y varios miembros del gabinete que preside Javier Moliner acudieron a las manifestaciones. También las respaldaron el Ayuntamiento de Castellón y su alcaldesa, Amparo Marco, el secretario general del PSPV en Castelón, Compromís o Esquerra Unida, entre otros.