Castellón tiene 119 kilómetros de carretera en los que el riesgo de sufrir accidentes es importante. Se trata del 12% del total de la red viaria provincial, porcentaje que está ligeramente por encima de la media nacional (11%). Además, cuenta con dos tramos entre los 60 más peligrosos de España, ambos en el término municipal de Vinaròs.

Son las conclusiones del estudio Eurorap 2019, del Real Automóvil Club de España (RACE), en el que se analiza el estado de las carreteras españolas. Para elaborarlo se han utilizado datos de siniestralidad entre los años 2016 y 2018; y se ha puesto la lupa en los viales que tienen una IMD (intensidad media diaria de tráfico) superior a 2.000 vehículos diarios. Entre ellos, del principio de la N-238 hasta el acceso a la AP-7 de Ulldecona, y del kilómetro 1.050 al 1.065 de la N-340 son los dos puntos de la provincia en los que es más probable sufrir un siniestro con un vehículo, el 31º y el 52º más peligroso dentro de España, respectivamente.

MODERADO // Inmediatamente por debajo en la escala de peligrosidad, consideradas como de riesgo moderado, hay otros cinco tramos. Cuatro de ellos están en la maldita N-340: desde el final de la variante de Benicàssim hasta Torreblanca, del acceso de Alcalà de Xivert al cruce con la CS-500 en Peñíscola, del final de la variante de Castelló al final de la variante de Benicàssim, y del cruce con la N-225 en el Grau con la variante de Castelló. El otro está en la N-225, entre el cruce con la N-234 (Algar de Palancia) y el enlace con la A-7 (término de la Vall d’Uixó).Haciendo balance, según el Eurorap, en la provincia existen 3,8 kilómetros con riesgo muy elevado, 50,3 con riesgo elevado y 65,5 de riesgo moderado.

El informe también arroja un dato positivo, ya que mientras que en el del año pasado aparecían los 11,7 kilómetros de la N-340 que transcurren entre Peñíscola y hasta Vinaròs, hasta el cruce con la CS-500, como uno de los 10 puntos más peligrosos para los camiones en todo el país, en el del 2019 sale de la lista.

Galicia concentra los dos viales más peligrosos de España, según este estudio de tráfico. El primero es la N-541, en Ourense, donde este año ha habido, por el momento, siete accidentes graves, con dos fallecidos. El segundo es la N-642, en Lugo.