Una pantalla de ordenador sustituye a la ventanilla, pero el sentimiento es parecido al de aquellos que se enfrentaban a la burocracia y leían la inscripción de Vuelva usted mañana. Las ayudas Resistir de la Generalitat para aquellos sectores más afectados por la crisis del covid se han convertido en un calvario, debido a los diferentes problemas que genera la tramitación digital de los expedientes. Una situación que comenzó con mal pie el jueves pasado, cuando los servidores de la Administración autonómica se colapsaron durante media mañana, y que han seguido con la presentación de los documentos.

Así lo han explicado empresarios y gestores a Mediterráneo, extremo que ratificó el delegado en Castellón del Colegio de Gestores Administrativos de la Comunidad, Fernando Cumba. «Cada solicitud tiene un plazo de tres días para presentarla, pero hay quien aún no ha podido completar ninguna, porque la web explica que se ha agotado la capacidad máxima y que se intente más adelante», indicó. Además, se han detectado problemas con la identificación de certificados digitales, algo que en este caso no sería achacable a la Generalitat, sino a la plataforma del Gobierno que gestiona estos documentos.

Desde la Conselleria de Economía reconocieron que las incidencias existen. «El departamento de informática de la Generalitat está trabajando para restablecer el servicio lo antes posible», detallaron. Por ello, «el plazo de 72 horas concedido se ampliará de oficio, respetando la fecha de criterio que hubiera correspondido en cada caso», afirmaron desde este departamento. Unas explicaciones que también se dan en la web de Labora, donde se deben tramitar las peticiones, compatibles con las que se preparan en colaboración con los ayuntamientos. Economía añadió que debido a estos problemas no dispone de datos sobre solicitudes, ni de cuántas de ellas son de Castellón. Solo el primer día fueron más de 42.000 en toda la Comunitat.

Imprevisión

Cumba mencionó que en las gestorías «tuvimos que adaptarnos en su día a las necesidades, y la mayoría pasamos de tener internet ADSL a la fibra óptica; pero esto no sirve de nada si los servidores no funcionan correctamente y no hay una forma alternativa de tramitar». Desde la Generalitat se aseguró que la ayuda se ha calculado para evitar que nadie se quede fuera, pero los gestores creen que cuando se agoten los 9 millones para la provincia quien llegue tarde se quedará sin dinero.

«Hay disgusto y ansiedad, porque es desesperante perder toda la mañana y ver que no se puede avanzar», explicó una gestora que prefirió no dar su identidad.

Testimonio

Iván Doblado tiene negocios de ocio nocturno en Castelló, y desde marzo apenas ha podido abrir unas semanas. «Del 19 de junio al 18 de agosto y del 9 de diciembre al 5 de enero», concreta. Como él, hay miles de pequeños empresarios que desde hace meses tienen un contacto estrecho con su gestor. «Hablo más con él que con mi novia», afirma, y lamenta que las ayudas «son pocas, son insuficientes y que encima, den todos estos problemas», que van desde las incidencias en los servidores informáticos a la saturación de cambios y anuncios a medida que avanza la pandemia. «Resultante frustrante, cuando encima perteneces a un sector que se ha sentido criminalizado estos meses», concluye.

Pago a ayuntamientos

El conseller de Hacienda, Vicent Soler, explicó ayer en Les Corts que la Generalitat ya ha realizado órdenes de pago a los ayuntamientos por valor de 90 millones de euros de los 100 que contemplan las ayudas Paréntesis, incluidas en el plan Resistir. Las corporaciones provinciales y locales aportarán 60 millones más. Soler definió la medida como un «ejercicio de empatía» con los sectores más afectados, con seis bloques de ayudas y «es un plan vivo que ha ido incorporando y podrá ampliarse según necesidades».