Con una inversión que supera los 413.700 euros, la Conselleria de Sanidad ha iniciado la ejecución del proyecto de mejora de la eficiencia energética del centro de salud de Nules, un edificio que ha sido objeto de diferentes intervenciones en los últimos años para modernizar una infraestructura antigua y que presentaba diferentes problemas que venían acusando, tanto para el personal sanitario como para los usuarios.

El proyecto, en esta ocasión, supondrá la sustitución de la carpintería exterior, la optimización del aislamiento térmico y la impermeabilización de las cubiertas, como destacaron ayer desde la Conselleria en un comunicado. Con un plazo de ejecución de seis meses, toda la intervención se llevará a cabo «con el ambulatorio en funcionamiento y sin interferir en la asistencia a la ciudadanía».

COFINANCIACIóN / Con la cofinanciación de la Unión Europea, la reforma pretende dar solución a la deficiente climatización del edificio, que generaba quejas entre los vecinos y profesionales, tanto en invierno como en verano. Para ello, van a cambiar «ventanas, puertas, el muro cortina y el lucernario de la cubierta» y, como complemento, está previsto «ampliar los huecos de paso de las consultas para mejorar la accesibilidad», ya que en algunos casos entrar con un carro era complicado.

A esta intervención en infraestructura se suma otra decisión que afectó recientemente al servicio asistencial: la incorporación de un nuevo pediatra.

Hace un año, los propios profesionales que atienden el servicio evidenciaron esta carencia colocando carteles en la puerta de sus consultas en los que pedían paciencia a los usuarios porque un solo especialista debía atender a los más de 2.200 menores de la localidad. La incorporación del médico se produjo hace meses.