Una actividad de ocio con kayaks estuvo a punto de convertirse en una gran desgracia. La inmediata respuesta de Salvamento Marítimo lo evitó. Aún colea el suceso ocurrido el miércoles en la playa de Almassora, cuando 16 jóvenes, menores de edad, y dos monitores tuvieron que ser rescatados por el rápido cambio del tiempo, con fuerte viento de hasta 55 km/h que les arrastró una milla y media marítima, cerca de dos kilómetros, de la costa.

El final fue feliz, pero al mismo tiempo los servicios que realizaron las labores de salvamento critican que los participantes en esta salida lúdica no llevaban el chaleco salvavidas obligatorio.

El jefe de Salvamento Marítimo en Castellón, Javier García, apunta que “la rápida intervención evitó la desgracia”. “Los kayaks que utilizaron se alquilan en las playas, son más pequeños y es fácil que el viento se los pueda llevar. El tiempo cambiante les pilló desprevenidos y los monitores no tuvieron el cuidado de mirar la previsión meteorológica”, dice.

García informa de que “cuando salieron había bandera verde, pero poco después se iniciaron vientos fuertes que, incluso, obligaron a cerrar el puerto de Castellón, por eso el mar les arrastró. La unidad de rescate ha criticado que no llevaban el chaleco que hay que portar siempre, más aún entre gente joven. Eso sí, cumplieron en que no hay que abandonar nunca la embarcación, porque en ese caso la localización hubiera sido prácticamente imposible”.

agradecimiento // El Club Natación Castalia Castellón planificó esta actividad para coger fuerzas y pasarlo bien cara a iniciar una nueva temporada de nado en la piscina. Su presidente, Paco Valls, agradeció el papel de Salvamento Marítimo y del dispositivo de rescate, “ya que los jóvenes están todos bien y ayer ya entrenaron con normalidad”, concretó.

Sobre los hechos, Valls explicó que “lo que pasó son cosas que son imposibles de prevenir, pues el tiempo cambió en pocos minutos. El mar se los llevó adentro y no podían volver; siguieron el protocolo en estas situaciones”.

Al respecto de que no llevaran chaleco, el presidente señala que “estaban cerca de la playa, a menos de 200 metros, por lo que no hacía falta y son nadadores experimentados, incluso había socorristas en el grupo; no tenían previsto pasar las boyas que advierten también a los playistas”. La actividad con kayaks la contrataron a una empresa externa. H