Frank Castelló no le hacía ascos del todo al punto en el Enrique Miralles, pese a haber desaprovechado el 1-2 en el minuto 80.

«Lo principal es que hemos sumado, pero después de tenerlo todo tan cerca...», comenzaba su explicación. El bocairentí achacaba el empate al desbarajuste por los cambios obligados: Kike Ferreres se retiró lesionado, mientras que David Cubillas y Javi Serra dejaron el partido antes de tiempo por sendas sobrecargas.

«Los cambios obligados nos han trastocado: Juanjo estaba de lateral, Marenyà también en la banda... Ellos se han crecido y han quemado las naves», destacaba. «En el 2-2 nos pilla a mucha gente fuera de sitio por culpa de los cambios; temíamos que, en algún momento, pudiéramos cometer un error, que nos ha costado el empate», corroboró Castelló, que desgranó las sustituciones: «Kike [Ferreres] se ha roto, Cubillas me ha dicho que no podía desde hacía muchos minutos, Javi Serra tampoco podía más... Son todos cambios forzosos, porque ya habéis visto que Javi Rubio estaba fundido», explicó con detalle. «Aun gracias que hemos aguantado el tirón», añadió.

Con todo, Castelló indicó que «no nos pueden hacer ni el primer gol ni el segundo...». «Han sido errores graves en los dos únicos tiros suyos, aunque nosotros tampoco hemos creado mucho peligro». En realidad, los albinegros marcaron en una conexión entre Cubillas y Javi Rubio, y tras un grave error de un central del Crevillente, que dejó a Javi Serra mano a mano con el portero benicarlando Óscar Fornés. Los dos tantos locales llegaron en dos balones filtrados al área, con remates plácidos de Samu López en el 1-0 y de Álex Pastor en el 2-2.

ADIÓS AL PROMEDIO // Esta semana (dos empates en tres encuentros) rompe con la previsión de Castelló: «Ahora vamos dos puntos por debajo de la media de dos puntos por partido». Efectivamente, los albinegros suman ocho unidades en cinco encuentros, teniendo el liderato, ostentado por el Eldense, ya a cinco puntos.

Con todo, espera el domingo un encuentro radicalmente distinto. «Ya estamos pensando en el Villarreal C, que será un encuentro que no se parecerá en nada a este», constató Castelló.

‘RAJADA’ DEL CAMPO // Si Castelló ya fue muy crítico el domingo anterior sobre el terreno de juego del Gerardo Salvador, más todavía se mostró ayer. «Si dije que el campo del Paterna ya era malo, este es muchísimo peor», manifestó sobre el césped artificial, muy antiguo, del Enrique Miralles. «Está todo lleno de baches», profundizó. «Ni ellos mismos entrenan aquí», constató sobre los alicantinos. «El año pasado tuvieron más de 30 lesiones musculares, una barbaridad», aderezó el entrenador del Castellón.