Tras las dos victorias cosechadas ante dos rivales de la zona baja como eran el Celta y el Mallorca, el Villarreal aspira este viernes a mantener la buena dinámica del inicio de LaLiga tras el parón por el covid-19 y sumar un nuevo triunfo a domicilio en casa del Granada. Un equipo, el andaluz, al que Javi Calleja tiene todos los respetos del mundo ya que es «un rival directo por Europa». «Están haciendo una temporada buenísima y tendremos que estar a muy buen nivel físico y mental para sacar adelante un encuentro dificilísimo», dijo el entrenador del Submarino.

Debido a la acumulación de partidos y al cansancio, Calleja prevé cambios de inicio pero también considera que los que se hagan durante el choque volverán a ser «determinantes» como se ha visto en partidos anteriores. No estará Pau por sanción, pero regresa Iborra. «La gente de refresco es vital e Iborra --baja ante el Mallorca por sanción-- es uno de ellos. Es un líder en el campo y marca los tiempos del partido. Contagia a los compañeros y es una pieza clave en nuestro juego», agregó el técnico.

A tenor de que los partidos se están resolviendo por pequeños detalles Calleja no ocultó que deben encontrar la forma de que Paco Alcácer participe más en el juego del equipo y que a Samu Chukwueze le falta ser «un poco más aplicado en defensa». «Con la voluntad que está poniendo para ello, va a ser un jugador mucho más completo», dijo al respecto.

Y es que para lograr el objetivo de meterse en Europa, la aportación de todos los jugadores es más que necesaria. «A todos nos va a condicionar mucho el tema físico. No habíamos vivido antes esta situación, en este final de temporada hay muchos partidos y es imposible que los equipos estén al cien por cien. Puede ser una constante y, al final, quien dosifique mejor a los jugadores y tenga mejor estado de ánimo saldrá con más confianza a los partidos. Tenemos un calendario muy exigente, pero también toda la confianza del mundo», concluyó el entrenador groguet.