No fue el resultado esperado, pero más allá de las pruebas con vistas al Mundial, el amistoso en el Estadio de la Cerámica sirvió para mejorar las estadísticas de Julen Lopetegui en el banquillo de la Roja, donde no conoce la derrota después de sus primeros 19 partidos (13 victorias y seis empates). Sus números representan el segundo mejor comienzo de un seleccionador tras el de Luis Aragonés en el 2006 (25 encuentros, con 17 triunfos y ocho igualadas).

En sus primeras valoraciones del último amistoso en territorio nacional, el técnico alabó la actuación de uno de los protagonistas, Andrés Iniesta, en su despedida como internacional en España. «La ovación que ha recibido del público es algo que él se ha ganado por el gran rendimiento ofrecido en su carrera, pero lo más importante es el partido que ha hecho. Lo hemos sustituido porque estaba programado así y por un pequeño golpe», resumió Lopetegui.

El seleccionador no mostró preocupación por la falta de gol del equipo. «No hemos estado afortunado en las opciones generadas, pero la intensidad, el ritmo de juego y la continuidad es lo más importante y el equipo lo ha hecho bien. Seguro que habrá días que aprovecharemos la mitad de oportunidades que hemos tenido ante un equipo complicado como Suiza», puntualizó.

No dio minutos a Rodri, en lo que hubiera sido el adiós perfecto de la que ha sido su afición en los últimos años. La ausencia de Busquets, afectado por una gastroenteritis, alimentaron las esperanzas del nuevo jugador del Atlético, pero Julen solo utilizó a los que viajarán a Rusia. En ese puesto la alternativa del azulgrana está clara: «Thiago ha jugado tres partidos consecutivos y ha rendido bien en esa posición».

EL GOLEADOR // Álvaro Odriozola no desaprovechó la oportunidad que le brindó la ausencia de Dani Carvajal (en proceso de recuperación de la lesión muscular) y demostró que está capacitado para ser titular el día 15 en el debut en Rusia contra Portugal (20.00 horas). El lateral de la Real Sociedad, más allá de su golazo, mostró el atrevimiento de un joven de 22 años y la seguridad de un veterano pese a su inexperiencia internacional. «En lo personal, estoy muy feliz por ayudar al equipo con un gol. Si me lo dicen hace año y medio no me lo creo, pero el fútbol y la vida son así», resaltó un futbolista que 18 meses atrás jugaba en Segunda División B con el filial donostiarra y que ayer tuvo el respaldo de su padre y su hermano en Vila-real. Sobre las opciones mundialistas de la Roja, fue rotundo. «Lo único que podemos prometer es dar el cien por cien para intentar traer la copa del mundo. Veremos lo que pasa en el campo, pero nuestro compromiso es estar al cien por cien», destacó el lateral.

Otro que recibió aplausos en Vila-real fue Piqué, olvidando viejas tensiones del culé en la Roja.