Marc Castells evitó la sorpresa de la jornada que hubiese significado la derrota del líder Castellón en el campo del colista Orihuela. En el minuto 87, el central valenciano inició una contra que él mismo culminó en el 2-2 final, cuando el rival jugaba con un futbolista menos por la expulsión de Maxi en el minuto 73. Un gol que mantiene al conjunto castellonense con su condición de equipo invicto. La escuadra de la capital de la Plana llegó líder a Los Arcos y salió más líder aún, y con la polémica del posible penalti sobre Javi Serra en el minuto 92.

La puesta a punto de los albinegros en tierras de la Vega Baja presentó una única novedad en el eje de la defensa. El central valenciano Héctor Verdés finalmente fue el descartado por Óscar Cano, quien no quiso arriesgar con el zaguero que se lesionó ante el Villarreal B y que aún no está al cien por cien. Su lugar fue ocupado por Marc Castells, que de esta manera se estrenó como titular en el presente curso liguero. El resto de efectivos fueron los habituales en el plantel.

El partido arrancó con un Orihuela que le puso el ritmo al duelo. Los futbolistas de José Francisco Grao Pato tuvieron el balón, presionaron bien y le pusieron muchas ganas y empeño por incomodar a los castellonenses. El equipo escorpión se acercó a los dominios de Álvaro Campos en acciones elaboradas o bien en balones directos buscando a su hombre referencia: Antonio Martínez. El exalbinegro puso a prueba a Álvaro en el minuto 2, aunque sin éxito alguno.

Dos saques de esquina. Dos aproximaciones más y el cántaro se rompió en el minuto 15 con el 1-0. Balón largo en diagonal a José María Cases y este, en el mano a mano ante el arquero de la escuadra castellonense, envió el cuero al fondo de las mallas. Era la confirmación de que el Castellón no estaba cómodo en el campo sin el balón. Su rival le presionó, no le dejaba apenas respirar.

Resurgir albinegro / A pesar de ello, el 1-1 no llegó de milagro. El delantero manchego César Díaz se escapó de todos sus defensas, se quedó solo ante el meta Emilio José y este, con la yema de los dedos, rechazó a córner, a pesar de que el colegiado señaló que era saque de portería. Eso llegó en el minuto 19. Dos más tarde el propio César Díaz lanzó un gran trallazo que salió lamiendo el palo. Un nuevo aviso de las intenciones del conjunto capitalino.

Estos sustos dejaron a los oriolanos con las orejas tiesas, en señal de guardia. El glorioso Castellón despertó y su juego empezaba a imponerse por momentos. El 1-1 llegó en el minuto 26 con una acción por la derecha del guipuzcoano Joseba Muguruza, que centró largo y, tras un primer intento de remate de Cubillas, el cuero le llegó a César Díaz en el segundo palo y sólo tuvo que rematar el balón al fondo de las mallas. Los orelluts empezaron a dejarse ver. Robaron, recuperaron, presionaron y encararon al rival.

El partido, que no fue nada del otro jueves, deparó un justo empate (1-1) a la conclusión de los primeros cuarenta y cinco minutos, donde el Castellón, sin elaborar un gran fútbol, consiguió nivelar el marcador y llegar al descanso con el encuentro bastante controlado, pero con tota la segunda parte por delante para certificar la remontada.

Reanudación / La segunda mitad arrancó sin novedades en ambas formaciones. El Orihuela quiso ser el mismo que en el arranque del duelo, donde mandó y tuvo controlado al equipo albinegro. Las llegadas al área del rival no eran tan peligrosas como en la primera parte. Eso sí, pudo anotar de nuevo César Díaz en el minuto 55, en un balón que el goleador orellut no esperaba que le llegara y remató desviado.

La primera llegada del Orihuela al área castellonense acabó con gol, en el 2-1. Dos remates al larguero, un balón que sacó con apuros Álvaro y el cuarto remate de Gilabert acabó con el balón al fondo de la red. Una serie de errores defensivos derivaron en el segundo gol local, así que tocaba remar contracorriente otra vez.

buscar soluciones / Fue entonces cuando empezó el baile de los cambios. Arriesgó Óscar Cano retirando a un lateral como Muguruza, dando entrada a Íñigo Muñoz, aunque por la derecha Javi Serra actuó de falso lateral diestro. Era cuestión buscar soluciones. A todo ello, una innecesaria entrada de Maxi dejó al Orihuela con diez en el minuto 73. A buen seguro que el técnico y la afición local al final se acordó de esta acción que dejó diezmado a un Orihuela que en el terreno de juego no dio imagen de equipo colista del grupo. De nuevo superioridad numérica para el Castellón, como en el partido contra el Villarreal B en Castalia.

En esta ocasión se supo hacer frente a esta situación contra a un equipo muy necesitado de puntos y triunfos. Se vigiló bien al contrario y se jugó con mucha cabeza. Era cuestión de esperar la oportunidad, porque tenía que llegar por lo que se estaba viendo sobre el terreno de juego.

A por todas / Nunca arrojó la toalla el equipo albinegro. Cuando todo parecía perdido y se iba a consumar la primera derrota de la temporada, una acción iniciada por Marc Castells fue culminada por el propio central valenciano tras varios toques y paredes. Él se la guisó y él se la comió. Era el 2-2 con el que se llegó al final de un partido en el que el Castellón llegó líder a Orihuela y salió un poco más líder.

El encuentro acabó con protestas de los jugadores del Castellón hacia el colegiado porque este no señaló un posible penalti a favor de los albinegros con el tiempo cumplido. Se ganó una tarjeta amarilla del cordobés Rafa Gálvez, por protestarle al árbitro.

Al final empate del Castellón en Orihuela, un campo gafe en el que nunca ganaron los albinegros tras nueve visitas.