El Villarreal B demostró el porqué de su condición de líder. Ni las ausencias de hombres de ataque destacados (como Fran Sol y Leo Suárez); ni siquiera jugar lejos de la Ciudad Deportiva, donde tan solo ha dejado escapar cuatro puntos hasta la fecha. El Mini Submarino cimentó un nuevo triunfo a base de goles para continuar comandando la clasificación en el grupo III de Segunda B y, de paso lanzar un claro mensaje a su único perseguidor, el Reus, que juega hoy en el campo del Olot: los amarillos no piensan bajar el ritmo (2-4).

Y así lo demostraron ayer en Bunyol, ante el Atlético Levante. Enarbolando la bandera del gol como principal argumento (por algo es el equipo más realizador de la división de bronce del fútbol español con 47 tantos), y pasando por encima de un filial granota que tan solo pudo maquillar el resultado con la goleada ya certificada y cuando los jugadores de Paco López decidieron dejarse llevar y bajarle una marcha a su fútbol de muchos quilates.

EL PICHICHI AMARILLO // Pero antes, ya habían pasado por encima del conjunto local. En apenas 40 minutos, y tras 20 iniciales de tanteo entre ambos contendientes, Carlos Martínez decidió que ya había llegado su hora. Como hasta en 11 ocasiones en lo que llevaba de temporada, el hombre gol del conjunto groguet aprovechó un preciso servicio de Cantalapiedra, que suma ya una asistencia y un gol en tres choques como amarillo, para perforar la meta de Koke e iniciar el camino del Mini Submarino hacia su 15ª victoria en 24 jornadas.

Sin tiempo para que el rival asimilara el gol encajado, únicamente cuatro minutos después, Ramiro empezó su andadura hacia el protagonismo en el encuentro. El centrocampista charrúa subió el segundo tanto al marcador de la Ciudad Deportiva del Levante, resultado con el que se cerró una primera parte en la que el Mini Submarino fue netamente superior al conjunto local, que con la derrota de ayer acumula ya cuatro jornadas consecutivas sin sumar punto alguno.

En los segundos 45 minutos, el guión apenas cambió. El cuadro vila-realense llevaba todo el peso del encuentro y el Atlético Levante no podía más que dedicarse a achicar agua en defensa. De hecho, el Villarreal B no bajó ni un ápice su intensidad y, fruto de ello, en el minuto 55, llegó su tercer tanto, el segundo en la cuenta particular de Ramiro. En el 68’ fue Pedraza el encargado de, en un contragolpe de libro, dejar sin historia un choque visto para sentencia a 20 minutos todavía para su conclusión.

LA REAPARICIÓN // Tras el cuarto tanto, el Mini Submarino redujo la marcha en un partido que había pintado de amarillo de inicio a fin y decidió que si, con cuatro ya era más que suficiente en un envite que, junto a los goles, tuvo a Iván Alejo como protagonista.

Tras cuatro meses en el dique seco, el internacional sub-19 volvió a sentirse futbolista. Así, saltó al campo en el 82’, en una goleada que los levantinistas maquillaron con dos tantos, el último en el 90 y desde los 11 metros. H