La emoción, fruto de lo que ha vivido en los últimos días, le embargó en el inicio de su rueda de prensa, ahora ya como máximo accionista del CD Castellón. Fue el único momento en que ser permitió flaquear porque luego, durante media hora, incidió en su discurso de democratización del club y anticipó la ampliación de capital abierta para, «entre todos, recuperar el alma del Castellón».

En la concurrida sala de prensa, con la presencia de familiares; Óscar Cano y otros miembros del cuerpo técnico; el capitán David Cubillas; Àngel Dealbert, Alfonso Hernández, Javier Heredia o Pepe Mascarell, con Jordi Bruixola a su izquierda en la mesa, el empresario castellonense realizó un preámbulo. «Es un día importante e histórico, para el club y para mí, por lo que representa [reprime las lágrimas]. Son emociones difíciles de llevar, porque hace dos años, cuando entramos, dimos un paso muy importante. Creíamos en otra forma de hacer las cosas y que el club se podía salvar; lo logramos e hicimos algo histórico», recordó. «Pero nos tocó tomar una decisión estratégica por las necesidades económicas», añadió, en alusión a la búsqueda de un compañero de viaje. «Fue difícil encontrar ese apoyo económico --prosiguió Montesinos-- y nos tocó poner el club en manos de gente foránea».

«Ha sido un año complicado por muchas cosas, aunque esa desafección, junto a la manera de funcionar y entender el club desde el alma, nos llevó a volver a plantearnos lo que queríamos para el Castellón», contextualizó, ya mirando hacia ese esperado 2022: el centenario. «Se han conseguido muchas cosas y otras que se lograrán, porque vamos a hacer un club muy grande», dijo.

«VOY A ABRIR EL CLUB» // A continuación, la llamada a filas: «Voy a abrir el club a la sociedad de Castellón, porque la entidad así lo necesita y todos lo requieren, no como meros abonados que disfruten y sufran con el equipo, sino siendo parte de este club». «Si entre todos lo hacemos y aportamos, en la medida de nuestras posibilidades, el Castellón será siempre nuestro, de la sociedad de Castellón», manifestó. «He dado un paso vital, y lo he hecho por el club, por la afición y por la sociedad», incidió. «Cuando digo que no me dejéis solo, estoy seguro de que entre todos lo vamos a conseguir», comentó antes de desgranar qué modelo de Castellón pretende: «No quiero un club en manos de gente foránea, que se lo pasen de unos a otros y genere inseguridad». «Vamos a llevar al club a lo más alto, al fútbol profesional, pero con cautela, sin pisar el acelerador», subrayó. «Con cautela, humildad, mucho esfuerzo y trabajo», enfatizó.

El propietario del 87% de las acciones del Castellón no estirará más el brazo que la manga, económicamente hablando: «Hay que ver esos ingresos, los pagos, sentarse con proveedores y acreedores como hicimos el primer año que llegamos, cuando empatamos a nivel presupuestario...». «Con una gestión austera y con criterio, hacerlo lo mejor posible, aunque sin preocupaciones en el día a día», recalcó.

Fue más parco a la hora de hablar por qué él asume ahora el control total de la entidad (tras el abono de 2,3 millones de euros a José Miguel Garrido) y no hace algo más de un año, cuando la SAD requirió de la inyección del grupo del madrileño. «En la vida se toman decisiones, se meditan, se estudian..., pero sin un manual», hizo un rodeo. «La decisión parecía ser buena: pensamos que era lo mejor para el Castellón. Sin desmerecer nada, quizás lo más importante ha sido ver como se perdía esa conexión que hubo cuando entramos. Pensamos que estábamos a tiempo de dar ese giro y recuperar ese alma, por eso he dado el paso, jugándome mucho en el plano social y económico», enarboló. «No será un club presidencialista, porque soy muy participativo y cada uno tendrá su parcela, al contrario de lo que se venía haciendo», aseveró Montesinos como la base de «un proyecto muy potente».

PALABRAS... Y ACCIONES // «Vamos a recuperar, entre todos, el alma del Castellón», dijo. ¿Cómo? Lo explicó: «Más pronto que tarde se hará un ampliación de capital abierta a la sociedad, para que todos puedan ser propietarios». «No se puede hablar de cifras ni de fechas --matizó--, pero lo importante es que se hará, si es antes de finales del 2019 mejor que a principios del 2020», deslizó.