El Villarreal B desaprovecha la ventaja cosechada frente a sus rivales en las primeras jornadas de la competición. El enfrentamiento ante el Badalona se saldó con un empate a cero que de nuevo pone sobre la mesa los problemas de puntería que tiene el filial amarillo. Los de Miguel Álvarez no ganan desde el 15 de octubre, cuando se impusieron en casa por 3-2 al Formentera. La racha actual asciende a siete partidos sin ganar y seis empates consecutivos de los cuales los cinco últimos se resolvieron sin goles.
La dinámica con la que llegaba el Villarreal a este partido no era la más idónea. Más complejo aún se planteaba resolver esta situación frente a un conjunto que destaca por su solidez y veteranía sobre el campo. El combinado catalán tampoco llegaba en el mejor estado de forma demostrado esta temporada, pero una victoria les colocaba a dos puntos del play off y a tres del segundo clasificado, el Mini Submarino.
Un partido disputado / Durante los primeros minutos del encuentro ambos equipos tantearon el terreno sin complicaciones. El juego creativo no fluyó, por eso gran parte del primer tiempo se disputó en zona de nadie. Los equipos esperaban pacientes la apertura de espacios del rival para filtrar pases contundentes y con posibilidad de acabar en gol. El Villarreal B, apremiante con el control del juego, no se encontró todo lo cómodo que quiso sobre el césped. El Badalona cerró bien las filas y esto impidió que los de Álvarez explotaran su calidad en los últimos metros. Así, la ocasión más clara del primer período la tuvo el conjunto rival que aprovechó un despiste en defensa para atacar a la contra.
El equipo acusó la sustitución de uno de sus baluartes más habilidosos en la zona media del campo: Manu Morlanes; que abandonó el terreno de juego en el minuto 28 por lesión.
El segundo tiempo fue un fiel reflejo del primero, aunque en este la intensidad creció progresivamente y las ocasiones de gol fueron más claras para ambos equipos. El Villarreal B, con la necesidad de frenar su sequía goleadora, se estiró en los últimos minutos, lo que produjo dos cosas: en primer lugar los de Álvarez se aproximaron con más peligro al área rival y en segundo lugar el Badalona encontró sus opciones ofensivas con un rival más estirado y centrado en el ataque. José Miguel Morales, el guardameta catalán, se exhibió ante una delantera que buscó el gol de todas las maneras. El Mini Submarino terminó el duelo sin marcar, pero no por falta de ambición.
La lucha por el ‘play-off’ / El Villarreal B encadenó una buena racha inicial en liga donde sumó 21 de los 27 puntos posibles. Este comienzo le aventajó de sus rivales directos en la pugna por los puestos de play-off. El colchón de puntos ya se ha esfumado, aunque el cuadro amarillo se mantiene segundo. Ahora, un punto les puede hacer caer hasta la quinta posición, fuera de la promoción. Los groguets buscarán una victoria la próxima jornada en casa ante el Deportivo Aragón (sábado, 17:00 horas) que es el colista.
