El Real Madrid cerró un mal 2019 cediendo el liderato en solitario de LaLiga Santander al Barcelona, tras un encuentro de impotencia frente al Athletic Club en el Santiago Bernabéu, donde se estrelló en tres ocasiones con los postes y acusó falta de pegada.

Las buenas sensaciones del Real Madrid se frenaron por su falta de definición. En cuanto Karim Benzema no afina, lo acusa un equipo que enlaza tres empates consecutivos. Frente a un Athletic ordenado lo intentó tirando de todos los planes de los que disponía Zidane, sin éxito. La figura de Eden Hazard se añora durante este tipo de duelos.

Sin embargo, el duelo era atractivo. El planteamiento del Athletic provocaba demasiadas imprecisiones con balón del Real Madrid. Vinicius perdonaba la tercera, rematando mal en plancha un centro del costado. Rodrygo las ponía con calidad y Benzema cabeceaba sin superar a Unai. Solo lo hizo en un mano a mano que acercaba el gol tras el amago del delantero francés, pero su disparo cruzado lo sacaba de tacón Núñez. El balón caía plácido a Vinicius que controló en vez de chutar y desaprovechó la oportunidad más clara.

Resistencia vasca // Se mantuvo en pie el Athletic que heló el Santiago Bernabéu cuando Kodro enganchó la primera que tuvo y puso el balón en la escuadra de la portería de Courtois. El colegiado lo anuló por fuera de juego el día que la grada realizó una protesta por el VAR del clásico.

El aviso estaba dado para una segunda parte de total dominio de un Real Madrid que agudizó su repentina falta de gol. Un golpe de Kodro en la cara de Militao provocó un cambio inesperado. No podía ver por su ojo derecho y dejó su sitio a Nacho.

Los planes de Zidane se trastocaban. Su equipo perdía fluidez. Le costaba encontrar profundidad y la marcha necesaria para castigar el paso atrás que poco a poco fue dando el Athletic. Benzema no encontró la forma de superar a Unai y las maderas castigaron al Real Madrid. El segundo balón que tocó el zaguero Nacho lo estrelló en el larguero con un testarazo tras córner.

Sin gol // El ritmo de partido se desplomó. Al Real Madrid le faltó físico tras una semana durísima después de medirse a Valencia y Barcelona. La solución era Bale. Unai seguía amargando a Benzema y sacaba su disparo cruzado. No existió el Athletic en ataque. Carvajal salvó la única que pudo acabar en gol, lanzándose a un centro tenso de Lekue buscando al atacante Iñaki Williams.

Los minutos se esfumaban y se mascaba la impotencia en el Santiago Bernabéu. Vinicius pedía el cambio y el Real Madrid acababa con Jovic, Benzema y Ramos en punta, más de 9 que de central. La fortuna le dio la espalda y la madera repelió el testarazo de Jovic que habría dado el premio buscado. El mal año no podía tener un buen final. El equipo de Zinedine Zidane deja líder en solitario al Barcelona.