La verdadera moción de censura a Quim Torra no fue la de la semana pasada de Cs, sino la que se vivió ayer en el Parlament. La hoja de ruta unipersonal del president fue reprobada por todos de los grupos, incluso por sus compañeros de Govern.

CIUTADANS

«Viene aquí a

incendiar de nuevo»

Lorena Roldán, que promovió la moción de censura frustrada, achacó ayer a Torra la responsabilidad de que Barcelona «arda como un campo de batalla». «Usted lleva años alimentando el odio», aseveró. La líder de Cs tachó al president de «peligro público» por acudir a la Cámara catalana «a hacer una soflama separatista plagada de falsedades» que suponen una «nueva llamada a la revuelta». «Viene hoy aquí a incendiar de nuevo», espetó. «No respeta la justicia y encima sale a amenazar con otro golpe. Y lo dice tan alegremente tras tres días de caos», hurgó. «Habla de infiltrados, pero el único infiltrado que conozco aquí es usted», remató. También cargó contra la comparecencia nocturna de Torra, «anuncio publicitario» para «limpiar su imagen» y que «ni siquiera se acordó» de los Mossos. De ahí que volviera a abogar por el 155. «No vamos a permitir que gente decente tenga miedo por culpa de su tsunami violento».

ERC

«No es momento

de poner fechas»

Sergi Sabrià estuvo más distante que nunca de la figura y las propuestas de Torra. Un desmarque a su plan de un nuevo referéndum de autodeterminación en esta misma legislatura. «No es el momento de poner fechas», señaló, como otras veces, Sabrià, «sino de trabajar para acumular fuerzas».

El líder parlamentario de ERC dejó en evidencia el desconocimiento que su grupo tenía sobre la propuesta de Torra y, tras señalar cortésmente que «ERC la valorará», le recordó que «es a través de los grandes consensos que el independentismo se ha hecho grande». Es decir, los grandes planes individuales no conducen a nada. No es el único punto de conflicto entre los socios de Govern.

Sabrià exigió responsabilidades sobre las actuaciones policiales. «Hay conductas de los Mossos que son inadmisibles», clamó por el manifestante arrollado en Tarragona.

PSC

«Sea coherente y

dé un paso al lado»

Miquel Iceta criticó con dureza «la actitud irresponsable» del president y su Ejecutivo por alentar el choque institucional con «consecuencias en las calles y pueblos de Cataluña».

Tras defender el «derecho de manifestación pacífica», recordó a Torra que «un Govern no puede llamar a la desobediencia» y lo instó a dimitir. Después de afearle que «ponga la independencia por encima de la convivencia», le asestó que su «activismo le lleve a menospreciar la seguridad ciudadana». Consideró que la condena de la violencia llegaba tarde y mal, reprobando que no fuera «tan contundente como lo fue cuando dijo a los CDR apreteu, apreteu».

«Esperábamos a un Govern que nos diera calma, que apoyara a los Mossos. No lo vimos», añadió. «Sea coherente, dé un paso al lado y dimita», rubricó en una contundente intervención.

CATALUNYA EN COMÚ PODEM

«Discurso delirante

e irresponsable»

Los comuns cargaron implacablemente contra Torra. «Tiene la virtud de poner de acuerdo a toda la oposición con su dejadez de funciones». Jéssica Albiach le afeó que haga de activista y no de president. «Si no quiere hacerlo, tendrá que dejarlo», afirmó, reclamando su dimisión, después de criticar su «discurso delirante e irresponsable» de ayer. Albiach evidenció la distancia enorme que separa a su grupo del Ejecutivo catalán. La líder de los comuns en el Parlament clamó contra un Govern «ausente». «Tres días callado y usted viene aquí y hace un discurso delirante e irresponsable que no se corresponde a la realidad del país. Una tomadura de pelo tras otra», censuró.

CUP

Críticas al «gestor

de las migajas»

Carles Riera dibujó a Torra como un mero «gestor de las migajas» y criticó el «absoluto fracaso de la implementación de la república» de lo que se autodenominó «Govern efectivo», aquel que así se bautizó tras la imposibilidad de investir a Carles Puigdemont. «La gente no se echará atrás en nada por más terrorismo de Estado y Ejército que se despliegue», sostuvo durante su intervención, en la que evitó hablar de «violencia» en Cataluña.

PPC

Dardos contra el «Gandhi catalán»

«Compareció tarde y mal con dosis de cinismo insoportables de forma profundamente deshonesta», proclamó Alejandro Fernández. El líder del PPC aseguró que «si le dieran una paliza» a Torra, él la condenaría y no «se cachondearían» como cree que hizo el president afirmando que los manifestantes hacían «acciones de resistencia pacífica» en el aeropuerto. Se dirigió después a los «jóvenes» y aseveró que no tienen «la culpa de recibir órdenes de descerebrados». «Pediros que seáis rebeldes de verdad. No le entreguéis vuestra alma a ningún político, ni a mí». «Y mucho menos al Gandhi catalán este que tenemos aquí».