El pacto entre PSOE y Podemos para formar un gobierno de coalición, es la mejor muestra del tacticismo con el que se convocaron estas elecciones. Era un pacto cerrado que ha servido para reírse de sus propios votantes y lejos de reforzar el bloque de izquierdas, el centro derecha ha sumado más votos aunque menos escaños por la Ley D’Hondt.

A Sánchez se le fueron de las manos las decisiones políticas para crear confrontación entre españoles y la dejadez en Cataluña. Estas decisiones han servido para reforzar a Vox, mientras que se ha producido la debacle de Ciudadanos.

Mientras tanto, el Partido Popular sale reforzado de estas elecciones como la única alternativa real a Sánchez, creciendo 22 escaños y aumentando la diferencia con el tercer partido de 1 a 5 puntos porcentuales.

La duración de la coalición dependerá de lo que pueda conciliar el sueño Sánchez con Podemos de socio, pero entonces, solo podrá haber una alternativa de gobierno si el voto se concentra en el PP, de ahí la importancia de seguir en el centro derecha, sin perder nuestros valores pero con la ambición de querer representar a todos esos españoles.

En todas las elecciones generales, se hace una extrapolación de los resultados a nivel municipal. Parece que tener ya dos imputados que formaron parte de las listas socialistas de Marco y el desgaste de no dejar de llevar la contraria a los vecinos en temas como las tascas, tiene consecuencias. El PP gana más de 3.000 votos, el PSOE perdería dos concejales y el centro derecha sumaría más apoyo que la izquierda. Como titulaban los Scorpions en su canción Wind of Change, que soplan vientos de cambio en nuestra ciudad.

*Secretario General y Portavoz Adjunto PPCS